Las fuertes lluvias de las últimas horas han prendido las alarmas en el municipio de la Provincia Neira. Según señalan las autoridades hay riesgo de avalanchas y desbordamientos.
La temporada de lluvias sigue pasando factura a aquellos municipios que no tomaron enserio las advertencias que dejó la pasada ola invernal hace cinco años. San Luis de Gaceno es hoy el municipio que está en máxima alerta por las grandes posibilidades de desbordamientos y avalanchas.
Cerca de cinco mil habitantes están en riesgo por el inminente crecimiento de las quebradas El Toro, la Porfidia y la Sardinata, y el río Lengupá. Sus viviendas, ubicadas en cercanías a estas afluentes, son las que presentan la mayor amenaza por deslizamientos.
A pesar de los esfuerzos realizados por el Consejo Local de Gestión del Riesgo, la situación se ha tornado crítica por el abandono y la falta de interés que han tenido las autoridades municipales en los últimos años sobre este tema.
Las alertas y advertencias se han generado, pero esto no resulta suficiente para mitigar el riesgo que vive este municipio con cada temporada de lluvias. “Son alrededor de 40 mil millones de pesos lo que necesitamos para hacer la protección del área urbana del municipio. Pero es una preocupación constante porque los recursos no los tenemos”, señaló Camilo Ramírez, secretario de Planeación y Coordinador de Gestión del Riesgo de San Luis de Gaceno, a Caracol Radio.
Durante la pasada ola invernal se vieron afectados los mismos barrios que hoy están bajo la apremiante amenaza; las medidas de mitigación y prevención del riesgo no se tomaron; y hoy el drama se agudiza ya que el municipio no cuenta con cuerpo de bomberos sino que debe recurrir a convenios realizados con municipios cercanos para la prestación de esto servicio, lo cual haría más compleja cualquier tarea de atención en caso de presentarse una emergencia.
