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La alimentación es la tercera necesidad humana más básica, después del aire y el agua. Sin embargo, en el mundo, alrededor de 733 millones de personas pasan hambre, y más de 2.800 millones de personas no pueden permitirse una dieta saludable. Los conflictos y la violencia siguen siendo las causas principales del hambre.
El Día Mundial de la Alimentación busca promover la alimentación saludable y sostenible, producida especialmente en el marco de los sistemas agroalimentarios y por productores y productoras de la agricultura campesina, familiar, comunitaria y étnica.
Cada año se elige un tema central, que para 2024 es el derecho humano a la alimentación adecuada. Los ‘alimentos’ (en plural) representan diversidad, nutrición, asequibilidad, accesibilidad e inocuidad. Haciendo énfasis en que debería haber una mayor diversidad de alimentos nutritivos disponibles en nuestros campos, redes de pesca, mercados y en nuestras mesas, para beneficio de todos.
Ante los crecientes desafíos globales, los países deben estar preparados para enfrentar las dificultades que amenazan el derecho a la alimentación. Estos incluyen el crecimiento constante de la población mundial, las drásticas consecuencias del cambio climático sobre la producción de alimentos, las crisis sociales y conflictos que interrumpen el acceso y producción, así como el alarmante deterioro de los ecosistemas, especialmente en lo que respecta a la gestión del agua y la preservación de los bosques. Se requieren respuestas urgentes y estrategias en el corto plazo para garantizar un futuro sostenible.
Datos clave en el mundo:
Aunque en la actualidad se producen alimentos suficientes para todos, aún cerca de 730 millones de personas sufren inseguridad alimentaria en el mundo. Esto debido principalmente a que no cuentan con los recursos para producir sus alimentos o comprarlos.
De igual manera, más 2.800 millones de personas a nivel mundial no logran acceder a dietas saludables, lo que tiene un impacto directo en su salud.
Asimismo, se nota como un deterioro importante, la pérdida y desperdicio de más del 30% de los alimentos producidos y aptos para el consumo humano.
En todo el mundo, la inseguridad alimentaria es más frecuente entre las mujeres adultas que entre los hombres. A nivel mundial las mujeres tienen un 1,3% más probabilidades que los hombres de sufrir inseguridad alimentaria moderada o grave.
En Colombia:
La inseguridad alimentaria moderada o grave afecta al 26,1% de los hogares (14millones 605 mil personas) (Encuesta Calidad de Vida – ECV_FIES 2023, DANE-FAO); 2 puntos porcentuales menos que en 2022.
El 4,8% de los hogares se encuentra en inseguridad alimentaria grave (2,6millones de personas) [ECV–FIES 2023, DANE-FAO].
Para 2021, el 31,3% de la población no lograba acceder a una dieta saludable (3,3USD costo de la dieta saludable -dólares PPA por persona al día-) (Informe Mundial del Estado de la Seguridad Alimentaria y la Nutrición (SOFI 2023).
Inseguridad alimentaria y nutrición en mujeres:
El 29,2% de los hogares con jefatura femenina (del total nacional) tuvo prevalencia de inseguridad alimentaria moderada o grave en 2023 (30,9% en 2022), en contraste del porcentaje de hogares con jefatura masculina que para 2023 llegó al 23,6% (25.9%).
Situación que se eleva en centros poblados y rural disperso, que para 2023 reportó el 35,3% para jefatura femenina (36,3% en 2022) y 28,8% para jefatura masculina en 2023 (30,4% en 2022) [Encuesta Calidad de Vida – FIES 2023, DANE-FAO].
Para 2019 el 21,2% de las mujeres entre 15 y 49 años en Colombia sufría de prevalencia de la anemia [Fuente: OMS. 2021. Estimaciones sobre la anemia en el mundo. En: Global Health Observatory (GHO) data repository Ginebra].
Indicadores para niños y niñas menores de 5 años
De acuerdo con el informe: Levels and trends in child malnutrition (UNICEF, OMS y Banco Mundial 2023) para el periodo 2020-2022, el 11,2% de los niños y niñas sufría de retraso en el crecimiento.
Según este mismo informe, el 1,6% de los niños y niñas sufrían de emaciación en 2016y el 6,2% de obesidad; y el 11% de bajo peso al nacer.
El derecho a la alimentación adecuada es un asunto que se relaciona de manera directa con el desarrollo de los países, por lo tanto es indispensable tomar medidas para: i) buscar la sostenibilidad en la producción de los alimentos, ii) avanzar en el desarrollo de capacidades para que productores del sector rural (agricultura, ganadería, pesca y silvicultura) cuenten con el apoyo (económico y técnico) de manera que puedan avanzar en su incorporación en los mercados, iii) diseñar programas de educación alimentaria que faciliten la comprensión de la calidad de la dieta, siendo esta soporte para el estado de la salud de todos; entre otros.
