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Fue la respuesta que dio el Secretario (e) de Cultura de Tunja a los artistas y cultores, durante una reunión para tratar las problemáticas con la Carpeta de Estímulos debido a la reciente adenda que cambia el cronograma.
Desde el sector cultural de la capital boyacense, aseguran que en una película de horror se ha convertido el manejo que la Secretaría de Cultura ha dado a las distintas convocatorias que pretenden apoyar a los artistas de la ciudad.
La más reciente bofetada de la Secretaría a los artistas, tiene que ver con la Carpeta de Estímulos, pues cambiaron el cronograma, lo que, según el sector, da como resultado que al menos el 35% de los participantes quedarían por fuera de los tiempos de ejecución de los proyectos ganadores.
El pasado viernes 25 de octubre, Jorge Orlay Espíndola Suárez, Secretario encargado de Cultura, Turismo y Patrimonio Territorial de Tunja, se reunió con artistas y cultores de la ciudad, debido a problemáticas con la Carpeta de Estímulos a Procesos Artísticos y Culturales. La reunión estuvo acompañada por Nair Esmeralda Velandia Duarte, Personera Delegada para los Derechos Humanos y Asuntos Penales.
El sector cultural exige soluciones
Ferley Neira, actor, director de teatro, y gestor cultural, tomó la vocería para resaltar lo que el sector considera como un nuevo atropello de la Secretaría: la publicación de la Adenda 4 de la Carpeta de Estímulos, la cual cambia el cronograma así: la ejecución de las propuestas ganadoras estaba del 23 de octubre al 30 de noviembre, con la Adenda 4 pasó a la fecha del 15 de noviembre al 15 de diciembre.
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Para los artistas, este cambio de cronograma afectaría gravemente la participación.
«Ese cronograma como queda después de la Adenda 4, deja por fuera, por tiempos, al 33% de los proyectos presentados que son de la Línea de Circulación», dijo Neira.
Explica el artista: «Nosotros, si ganáramos, no podríamos ir al Festival de La Tigra (en Santander) porque es el 26 de octubre«.
«Hay una afectación clara y es que está violando todos los principios de contratación, porque una convocatoria se asemeja a una licitación: hay unas condiciones de participación bajo unas condiciones específicas; pero, esas condiciones no se pueden cambiar de tajo, y, efectivamente, ustedes incurrieron en un error, ese error está llevando a que el 30 % de los participantes queden por fuera», dijo Ferley Neira.
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«No es de lavarse las manos»; pero sí
Un delegado de la Secretaría aseguró que el cambio de cronograma no es un capricho de la Secretaría, «no es de lavarse las manos», y dio a entender que el Consejo de Cultura es el verdadero culpable de dicha situación.
El Secretario (e), explicó que los Consejeros de Cultura transmiten a la Secretaría las dudas y requerimientos del sector. Entre esos requerimientos para la Convocatoria, estaba la solicitud de jurados externos al departamento, lo que habría generado una demora y obligado a cambiar el cronograma. Sin embargo, la Personera delegada indicó al Secretario que los Consejeros no son quienes construyen la Carpeta, y es la Administración quien debe dar pronta respuesta a los inconformismos del sector.
Jorge Orlay Espíndola Suárez, inmediatamente respondió a la Personera, que él recién llegó hace un mes a la Secretaría como encargado, y por eso no estuvo en la contratación inicial.
Respuesta que lo único que deja ver, otra vez, es la falta de empalme, de diálogo, de conocimiento y seriedad para con los procesos que se llevan dentro de la Secretaría.
«Es importante conocer lo jurídico y lo administrativo, para dar una respuesta a todas las personas […] una respuesta sólida frente a lo que ha venido pasando […] Esto se empezó a construir desde agosto, y yo llegué hace algunos días […] Es más conveniente para todos tratar desde lo jurídico y lo administrativo […] Voy a dar una respuesta a través de un oficio«.
«No puedo comprometerme con algo que en mis manos no está», dijo el Secretario, asegurando que lo único a lo que puede comprometerse, por lo pronto, es a pronunciarse la semana que viene.
El sector de artistas y cultores quedó en las mismas con esta respuesta, pues como dicen ellos, seguramente el cronograma no cambiará y, aún peor, no sienten el respaldo de la Secretaría para afrontar las problemáticas y necesidades que tienen.