
A través de un enérgico comunicado, el Colectivo Resistencia y Lucha por el Agua de Socha, junto a la Veeduría Ciudadana Ambiental de Tasco (ASOACCTASCO), desmintió que los recientes bloqueos en la vía Bogotá–Tunja fueran responsabilidad de la Federación de Campesinos Parameros. En cambio, señalaron como responsables al gobernador de Boyacá, Carlos Andrés Amaya, y al representante de los ‘terratenientes del Cocuy’, Roberto Arango Torres.
Debe leer: Gobierno y campesinos acuerdan 10 medidas clave para proteger los páramos y sus comunidades
Según el comunicado, ambos actores habrían promovido intereses particulares, contrarios a la protección de los páramos, calificando su accionar como «regresivo, egoísta y retrogrado», en contravía del trabajo ambiental adelantado durante más de tres décadas en defensa del Páramo de Pisba.
Los colectivos denunciaron que el mandatario departamental habría puesto al servicio de particulares el aparato jurídico del gobierno, con el fin de revocar actos administrativos de protección ambiental. Asimismo, rechazaron el uso de la fuerza pública contra campesinos del sector El Alizal de Socha, quienes, según la denuncia, fueron detenidos y transportados esposados «como si fueran delincuentes«, en medio de una acción calificada como desproporcionada y represiva.
«Que seamos campesinos de sombrero y ruana no significa que no tengamos derechos»
“Que seamos campesinos de sombrero y ruana no significa que no tengamos derechos”, expresaron en el comunicado, al tiempo que exigieron al Gobernador garantizar la protección incondicional del páramo, actualmente amenazado por actividades de minería ilegal, de las que, afirman, el mandatario tiene conocimiento.
Le puede interesar: Roberto Arango, líder de la movilización de los campesinos del páramo ¿héroe o villano?
Advirtieron que los páramos no pertenecen a los terratenientes ni a los gobiernos de turno, sino a todos los colombianos, y reiteraron su derecho a manifestarse y defender el territorio.
Este es el comunicado: