Una nueva mesa técnica para verificar los avances de obra de la Terminal de Transportes en Tunja despertó la inquietud de comunidad y autoridades ya que se dio a conocer que la obra presenta graves atrasos. Los veedores de la obra mantienen la esperanza de que la terminal sea entregada en los plazos establecidos, pero para esto se deberán reforzar esfuerzos.
La terminación de la Nueva Terminal de Transportes de Tunja se ha convertido en otro de los puntos de discordia e insatisfacción en un amplio sector de la ciudadanía que desde hace años viene escuchando que la obra se terminará. Pero ahora resulta muy difícil creer en los plazos que se establecen ya que siempre terminan solicitándose postergaciones para la entrega de la obra.
La última mesa técnica realizada para verificar los avances de obra sembró un enorme manto de dudas ya que al parecer el plazo estipulado para la entrega de la obra, 19 de agosto de 2017, no será cumplido.
Actualmente la obra presenta un atraso acumulado del 11 por ciento. “Estos retrasos se presentaron debido al tema de las lluvias; está la obra actualmente en el tema de estructura metálica en un avance del 60 por ciento de la instalación de la infraestructura; se están realizando temas de vías, algunos temas de mampostería interna y se está haciendo el proceso para el alistamiento de un puente, para el cual también se requiere un permiso de la ANI (Agencia Nacional de Infraestructura). Hay que decir también que se presenta un retraso acumulado del 11 por ciento; a la actualidad la obra debería ir en el 72,48 por ciento y va en 61,32 por ciento de avance. Es decir que se requiere cumplir con un plan de contingencia”, comentó el concejal de Tunja Héctor Sánchez a EL DIARIO.
Y el atraso en la obra tiene varias implicaciones como reajustar la programación de la obra; la presentación de un plan de contingencia que permita hacer realidad el cumplimiento de los plazos, pero más importante que la presentación de dicho plan es su cumplimiento. De no realizarse estas acciones la principal consecuencia será que la terminal no será entregada el 19 de agosto, tal y como está previsto. “El plan de contingencia consiste en aumentar el número de personas que se encuentran laborando, en tener dobles turnos y en implementar algunas estrategias para que se atiendan varios frentes de trabajo de manera simultánea”, señaló Sánchez.
A pesar de que se tiene presente que hay atrasos en la ejecución de la obra, lo que resulta más preocupante es el avance que ha tenido la misma durante el 2017. Según se dio a conocer en la mesa técnica, la obra tiene un avance inferior al 3 por ciento por mes, cuando debería tener un avance mensual aproximado del 6,5 por ciento para poder cumplir con la fecha estipulada para la entrega. El panorama termina de oscurecer cuando se plantea que para terminar la obra en el plazo mencionado, el avance de obra por mes deberá ser del 7 por ciento como mínimo.
Las lluvias parecen la principal causa del atraso, pero verdaderamente no son el único factor que ha llevado a que Tunja todavía no cuente con su nueva terminal de transportes. Según explicó el concejal Sánchez, experto en temas de movilidad, el escaso avance se debe “al tema de que se está construyendo la estructura metálica. Esos elementos toca armarlos ahí mismo en el sitio y toca soldarlos, y eso implica que hay que generar una labor de soldadura de manera continua, y que cuando hay lluvias, por temas de seguridad industrial, según manifiesta el contratista, es muy complicado el avance. Esta es la principal razón que el contratista manifiesta” .
El concejal, al igual que el gabinete departamental y el gabinete municipal (Tunja), han manifestado que tienen plena confianza en que la terminal será entregada en la fecha establecida. Sin embargo, para el concejal será necesario que “se replantee el cronograma, hacer reajustes al tema del personal y mirar las estrategias posibles para solucionar el problema de soldadura a pesar de las lluvias. Hay que decir que en caja se cuenta con 12 mil millones de pesos aproximadamente, entonces, esta no sería la excusa; el tema de los materiales tampoco lo es, y nos manifiestan los contratistas que al parecer han tenido unas dificultades con algunos subcontratistas encargados de la soldadura (…) veo factible que se termine este año siempre y cuando se tomen los correctivos necesarios a nivel programación de obra, porque el tema financiero no es problema, el tema técnico tampoco”.
Otra es la visión que tiene el concejal Anderson Mendivelso quien le pide con insistencia a la Administración Departamental que asuma las riendas de este proyecto para poder cumplirle a la ciudadanía y que la obra sea entregada en los plazos estipulados.