La alarmante situación ha llevado a que la Administración Municipal busque soluciones a esta problemática.
El último Consejo de Política Social realizado en la capital boyacense sirvió para evidenciar la terrible problemática que se vive en la capital boyacense ha causa del incremento en los intentos de suicidio.
“Según la estadística de los últimos cuatro años, han sido en promedio once casos de suicidio por año, y la mayoría hombres”, señaló Óscar Jiménez, secretario de Protección Social de Tunja.
El Consejo de Política Social, sirvió además para plantear estrategias de la Ruta de Atención de conducta suicida. Primero se realizó un diagnóstico con el cual se buscó establecer señales de alarma y factores de riesgo, de modo que se pueda realizar una detección temprana para los casos de ciudadanos con conducta suicida. Líderes comunitarios y la comunidad en general fueron capacitados para detectar estos signos de alerta.
A la comunidad también se le orientó acerca de la atención de urgencias en el Hospital San Rafael y en las diferentes IPS existentes en el municipio, sobre la atención prioritaria en psicología o psiquiatría en las EPS.
Como iniciativa municipal para la prevención del suicidio hay varias herramientas y estrategias que se han venido implementando como centros de escucha municipal, establecidos en barrios parroquias y centros de salud; por parte de las Zonas de Orientación Escolar, estrategia APS y equipo de salud mental S.P.S.
“Hasta la fecha en Tunja tenemos un suicidio reportado, probablemente vamos a tener un menor número de muertes por suicidio al cerrar este año”, aseguró el Secretario de Protección Social del municipio.
Para el 8 de marzo del presente año, se dispondrá de una mesa interinstitucional en el Salón de expresidentes de la Gobernación de Boyacá, donde se hablará de los Centros de Escucha y de las estrategias que se están implementando.