La mudanza de las oficinas de la Secretaría de Tránsito de Tunja está teniendo un impacto sensible para todo el comercio ubicado al interior de este centro comercial.
El centro comercial Centro Norte está viviendo, a partir de este lunes, una de las situaciones más complejas de los últimos años, o por lo menos así lo perciben algunos de los dueños u operarios de locales comerciales en su interior.
Es que hoy ha sido el primer día, luego de varios años, en el que el centro comercial abre sus puertas al público sin que las oficinas de la Secretaría de Tránsito de Tunja funcionen allí.
“Las nuevas instalaciones de la Secretarçia de Tránsito y Transporte de Tunja funcionarán en la carrera 9 número 21-20. Debido al traslado que implica redes y plataformas necesarias para los servicios al ciudadano, se suspenderá temporalmente la atención al público de manera presencial, la cual se retomará el próximo viernes 30 de julio y atendiendo el sábado 31 de julio, el canal autorizado para atender requerimientos de la comunidad será atencionalciudadano@tunja.gov.co”, dio a conocer la Alcaldía de Tunja por medio de un comunicado.
Y si bien la intención de esta dependencia municipal al trasladar su sede es mejorar las condiciones en que brinda su servicio, el impacto está siendo absolutamente notorio entre los comerciantes de Centro Norte, que no saben cuál pueda ser el futuro de sus negocios en aquel lugar que se ha quedado sin su principal atractivo.
“Fue un golpe completamente. Las ventas se redujeron en un 50 o 60 por ciento. El golpe se sintió de una vez”, comentó Alexander Molano, uno de los comerciantes ubicados en la plazoleta de comidas de este centro comercial.
El impacto será principalmente para los comercios dedicados a la venta de bebidas y comestibles, pues aquellos negocios dedicados a la realización de trámites relacionados al tránsito municipal han previsto la situación y en los próximos días se estarán mudando a la par de la Secretaría de Tránsito de Tunja.
En cambio, es otra la sensación entre los comerciantes que allí quedan, que no saben todavía que idea tenga en mente la administración del centro comercial para estimular a la ciudadanía a asistir a este lugar.
“La verdad si afecta mucho porque, como puede ver, el flujo de gente es muy reducido, y tanto cafeterías como restaurantes nos estamos viendo muy afectados. La verdad hace mucha falta porque es lo que acá más o menos mueve gente”, explicó una de las operarias de una de las cafeterías del centro comercial.