El Paro Cívico ha dejado hasta el momento una ciudad dividida, entre los que apoyan las marchas y las manifestaciones por las causas ya mencionadas en este periódico en otros artículos, y los que se han sentido afectados por no poder movilizarse, no vender ni una sola media botella de aguardiente, por no poder viajar y, por otros más no poder que sin ellos no podríamos disfrutar de estas maravillosas fotos.
Tunja, dijeron algunos a través de redes sociales, parecía una escena de Walking Dead; sin dejar a un lado el motivo de las manifestaciones, EL DIARIO quiere mostrar esta fotogalería donde se pueden apreciar esas calles solitarias de nuestra ciudad capital, los visos de luz que ahuyentan los monótonos días de tonos fríos, y el porqué la llaman la Ciudad Estudiantil.
Cientos de estudiantes salieron a las calles a respaldar las protestas y aprovecharon para sentar una voz en contra del programa Ser Pilo Paga.
De verdad, esa es la realidad de la capital de Boyacá, una ciudad donde todo está escondido, los ciudadanos supuestamente de bien que deben ser la mayoría, ante los problemas se encierran, con ese hecho, dan paso a grupos de personajes que actúan por la paga para ser depredadores, las evidencias muestran personas de escasos recursos de toda índole como los supuestos perjudicados por los avalúos, son acaso ellos los propietarios en papeles de testaferros ubicados en puestos públicos o residentes fuera de la ciudad, se deben preocupar las autoridades sobre que tipo de población que en mayoría abunda por todas partes componen la sociedad Tunjana, alguien dirige escondido una crisis social y esperemos no resulte Tunja convertida en una comuna de Colombia. Todos sin ninguna excepción, entre Autoridades, Gremios y ciudadanos, se encuentran haciendo sus obligaciones de mala gana y los resultados son: desastrosos, por lo que se les pide, levanten el silencio, es irresponsable por su torpeza anidar un ave negra depredadora.