En la vereda El Roble, entre los conjuntos Burgos y Villa Teresa, se encuentra una infraestructura destinada a ser un parque comunitario que, pese a sus fallas constructivas, no será abandonada. Así lo confirmó la Administración Municipal, que anunció la recuperación de esta obra que presentaba defectos desde su empalme inicial.
Gracias a la gestión de la Secretaría de Infraestructura, en conjunto con el contratista y la interventoría, se alcanzó un acuerdo para iniciar un plan de mejora que tomará entre un mes y mes y medio. El objetivo, según indicó el alcalde Víctor Gamboa, es evitar que la obra se convierta en un “elefante blanco” y garantizar que los recursos públicos invertidos beneficien realmente a la comunidad.
Abrirán un concurso de diseño liderado por las Secretarías de Infraestructura y Planeación, convocando a arquitectos del municipio y a universidades del departamento, para redefinir el parque. Se espera que el nuevo diseño contemple espacios para mascotas, zonas de contemplación y áreas inclusivas para residentes y turistas.
«Lo importante es que esta obra no quede en el abandono, sino que se convierta en un lugar de encuentro y disfrute para todos los ciudadanos», concluyó el alcalde Víctor Gamboa.