“Los Chamitos”, se llamaba la banda que fue desarticulada en las últimas horas por la Policía de Tunja. En poder de los delincuentes fueron encontradas bazuco, marihuana, celulares y una gramera que utilizaban para pesar y vender la mercancía.
Ciudadanos venezolanos son ahora los encargados de la venta y distribución de drogas en Tunja.
En esta oportunidad siete venezolanos, con edades que oscilan entre los 24 y los 35 años fueron capturados y son señalados por las autoridades de ser los responsables de la dosificación de sustancias alucinógenas y su distribución por el sur de Tunja, que hacían en bicicletas.
El parte oficial de las autoridades dice que mediante información de fuentes humanas la Policía Metropolitana de Tunja, a través de la Seccional de Investigación Criminal (SIJIN) y la Seccional de Inteligencia Policial (SIPOL) en un trabajo articulado con la Fiscalía General Nación, se realizó un plan de trabajo donde se ordenó la diligencia de registro y allanamiento a un inmueble en el barrio El Triunfo, donde se logró la captura de siete ciudadanos de nacionalidad venezolana a quienes se les sindica de los delitos de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
Gracias a la información recolectada se desarticuló la banda “Los Chamitos”, quienes delinquían por más de un año en la ciudad, se dedicaban a la venta y dosificación de sustancias alucinógenas las cuales eran comercializadas en los barrios El Triunfo, Los Hongos, Bolívar, San Carlos y Plaza de Mercado del sur de la capital boyacense, en la modalidad de domicilio y/o menudeo; hallándoles en su poder 350 gramos de bazuco, 1.000 gramos de marihuana, 2 grameras y 10 celulares.
El perfil criminal de esta organización era utilizar falsa fachada la cual acordaban cita previa mediante llamada telefónica, los cuales se movilizaban en bicicletas para efectuar la comercialización de las sustancias alucinógenas. Es de anotar que tres de ellos registran anotaciones por el delito de Tráfico, Fabricación o Porte de Estupefacientes.
Los indiciados fueron judicializados y dejados a disposición de la Fiscalía General de Nación, para las audiencias de control de legalidad, con los jueces de control de garantías, los cuales legalizan las capturas y dictan medida de aseguramiento en centro carcelario y penitenciario para seis de ellos.