El cierre financiero de la ampliación y adecuación de la carretera alterna al llano o también conocida como la transversal El Sisga-Guateque-El Secreto, hace realidad el compromiso del entonces vicepresidente y ahora candidato a la presidencia Germán Vargas lleras.
Con este paso el gobierno nacional consolida un balance más que aceptable para el departamento al cabo de los dos últimos periodos; que pudo ser mejor, sin duda, pero que mostró avances que no se habían registrado en el pasado, tal como se puede comprobar con las ejecutorias realizadas.
Durante los dos periodos del gobierno Santos, los avances en el mejoramiento y terminación de la infraestructura en el departamento fueron significativos. En el caso de las vías, a partir de la responsabilidad asignada a Vargas Lleras las ejecutorias se vieron de modo significativo.
Hay que recordar que durante el siglo XX los políticos boyacenses del norte del departamento hicieron sus campañas siempre diciendo que habían gestionado la pavimentación de uno o dos kilómetro de la Carretera Central del Norte de Duitama hacia allá. Con la acción de Vargas Lleras, la repavimentación y rehabilitación de la vía se completó en su totalidad entre la capital del Tundama y Capitanejo y de ahí en adelante casi terminada hasta Pamplona en Norte de Santander.
La transversal de Boyacá en el tramo Chiquinquirá Puerto Boyacá, está prácticamente terminada hasta Otanche y se retrasó la obra hacia Puerto Boyacá, ante el escándalo de Odebrecht, firma que estaba ejecutando la obra y que por los motivos de todos conocidos han tenido que modificarse contratos y cronogramas.
Lo mismo se puede decir que ha pasado con la carretera del Cusiana, vía que debió estar terminada hace más de una década, recibió especial impulso en los últimos años solucionando el principal escollo de la vía, el sector de Peña de Gallo, que con la construcción del viaducto quedó superado.
También hay que recordar, independientemente de las polémicas por lo que pudo ser mejor, la superación del cuello de botella de la doble Calzada Briceño Sogamoso a su paso por el Puente de Boyacá. Fue Germán Vargas Lleras, quien en últimas empujó la solución en un claro ejemplo de toma de decisión.
Por eso el anuncio de esta semana hecho por el gobierno nacional de hacer el cierre financiero de 15 obras del programa 4G, donde está la Carretera alterna al Llano, es una clara demostración del gobierno nacional de garantizar el cumplimiento de los compromisos adquiridos que en el caso del Boyacá beneficia a la población del Valle de Tenza, una región con la que el país tiene una enorme deuda dado que esa región ha tenido que soportar el funcionamiento de la represa de Chivor cuyo impacto en la región cambió su economía, modificó el clima y el producto de la energía generada en los últimos 20 años no ha hecho más que robustecer los rendimientos de accionistas extranjeros, mientras a las región apenas le transfieren exiguos recursos.
Con la obra de rehabilitación y terminación de la carretera Alterna al Llano se abren inmensas posibilidades para la región, lo que debe llevar a la terminación inmediata de la carretera Puente Camacho-Garagoa-Las Juntas y la rehabilitación de las vías internas de la región, cuyos recursos deberían ser de la renegociación de las condiciones del aprovechamiento de las utilidades de la Represa, ya que no es posible que en los últimos 10 años se hayan girado como utilidades de ese recursos más de 2.5 billones de pesos a accionistas en el extranjero, mientras las comunidades siguen sufriendo las condiciones de las carreteras locales, entre otras carencias.
