De momento se tramitan licencias para adecuaciones de la sede, al igual que la compra de equipos biomédicos.
En abril pasado la Gobernación de Boyacá oficializó la adquisición de la antigua clínica de Saludcoop, a la que inmediatamente rebautizó como la Unidad Materno Infantil María Josefa Canelones.
En dicha ocasión no se concretó una fecha para la apertura de la clínica, pues era necesaria una adecuación de la planta física y de la infraestructura hospitalaria con la que entraría a funcionar dicha unidad materno infantil.
Pero tal incertidumbre parece haber llegado a su fin ya que hoy las autoridades departamentales calculan que la clínica abriría sus puertas al público en noviembre próximo.
El proceso no ha sido para nada sencillo pues es bien sabido que antes de cualquier intervención a la infraestructura es necesario contar con las licencias que avalen dicha intervención.
“Pese a que el señor gobernador había anunciado que su hijo nacería en esta Institución, esto no fue posible, ya que se deben adelantar muchos trámites, adquirir algunos equipos, dotar y adecuar la sede para que una vez entre en funcionamiento, preste un servicio adecuado y de calidad para las mujeres gestantes y sus bebés”, comentó el secretario de Salud de Boyacá, Germán Pertuz.
Pero a pesar de que a la Unidad Materno Infantil María Josefa Canelones aún demora un par de meses para entrar en funcionamiento, la atención a mujeres gestantes está garantizada en el Hospital San Rafael. “Por ahora el Hospital San Rafael esta en toda la capacidad para atender a las maternas y a sus hijos”, agregó Pertuz.
Igualmente se firmó un convenio por dos mil millones para la compra de equipos biomédicos que garantizarán la prestación de un servicio de alta calidad a las mujeres gestantes del departamento.
