El experimento, que comenzó el pasado 28 de agosto y se extenderá hasta el 11de setiembre, se realiza en la Casa Tibaná, en Chía, Cundinamarca. Manuel Orlando Sandoval nació en Paipa y estudia Ingeniería Aeroespacial en la Universidad de Antioquia.
Permanecer 15 días en un hábitat que simula un viaje espacial a marte o a la luna es la actividad que realizan por estos días estudiantes de Ingeniería Aeroespacial de la Universidad de Antioquia.
La misión es integrada por seis estudiantes, entre quienes está el paipano Manuel Orlando Sandoval Pinto.
Las misiones análogas son operaciones realizadas en tierra, en escenarios naturales o artificiales adecuados para simular entornos espaciales.
La Misión EAR-2 con los astronautas de la Universidad de Antioquia, realizará diferentes actividades durante dos semanas, hasta el próximo 11 de septiembre.
El lugar del experimento se localiza en la Casa Tibaná, en Chía, Cundinamarca, en donde desarrollarán estudios en diversas áreas como biología, medicina, ingeniería biomédica, robótica y comunicaciones, entre otras.
Manuel Orlando Sandoval, quien como oficial de ingeniería hace parte de la misión, nació hace 21 años en Paipa; es hijo del médico patólogo Jairo Sandoval y de la enfermera jefe Lucía Pinto Lara.
Con Manuel Orlando, hacen parte del experimento de dos semanas los estudiantes María Alejandra Botero, comandante; David Andrés Díaz, oficial de Ingeniería; Sebastián Augusto Zapata, oficial de Ciencia; Angélica Turizo Donado, Oficial de Ciencia; y Samuel López Zapata, oficial de Botánica.
Los participantes fueron seleccionados para emular misiones espaciales y durante las dos semanas tendrán que resolver toda clase de problemas técnicos, diseñar experimentos, analizar elementos de robótica, algoritmos y programas digitales, además de estudiar el comportamiento humano en espacios confinados.
El experimento en el hábitat análogo espacial se llama HAdEES-C, y es patrocinado por la fundación Cydonia. Es la primera estación análoga en Colombia para hacer misiones que simulan viajes espaciales a la luna y marte.
Estas misiones análogas se hacen en lugares que asemejan ambientes espaciales extremos de escenarios como Marte o la Luna: se puede experimentar falta de gravedad, cambios de temperaturas y confinamiento en espacios reducidos.
Este sitio tiene un área de aproximadamente 30m² de los que 18m² son los domos en los que viven y desarrollan sus actividades: habrá uno que funcionará como invernadero, otro como laboratorio y en el último estarán los dormitorios y la cocina.
Lo demás es el terreno rocoso similar al planeta rojo, por el que solo podrán caminar con sus trajes espaciales de simulación.
Esta estación análoga permite afinar la construcción, las operaciones, la logística y mejorar las comunicaciones de las tripulaciones. Esto es una preparación en Tierra para posibles misiones en el espacio. Se tendrá restricciones como la cantidad de energía, agua y el ancho de banda de las comunicaciones. Será un confinamiento total”, explica Óscar Ojeda, director de la Fundación Cydonia.
Esta Fundación para el desarrollo espacial propicia espacios análogos (terrestres) que simulan viajes espaciales para que los futuros astronautas se preparen.
“Viviremos experiencias nuevas y difíciles, en los 15 días no podremos bañarnos, haremos limpieza corporal con pañitos húmedos. El agua será solo para el consumo. Aprenderemos a distribuir muy bien nuestros recursos”, dice Manuel Sandoval, el oficial de ingeniería.
Sus días iniciarán a las 6:00 de la mañana con actividades y experimentos para comprender el comportamiento humano durante este tipo de misiones (la concentración, la productividad, evaluar conductas psicológicas porque el aislamiento no es fácil para los seres humanos), además del desarrollo de pruebas en las que se aplicarán tecnologías con las que podrán resolver percances en el espacio si es necesario.
Sus días terminarán a las 10:00 de la noche con la socialización de las actividades que desarrollaron durante el día.
La mayor parte del tiempo estarán realizando experimentos para comprender el comportamiento humano durante este tipo de misiones y pondrán a prueba tecnologías como drones, robots y un rover agricultor—vehículo de exploración espacial—que ellos mismos desarrollaron que se llama Sara.