El gremio denuncia que ejercer la labor se está convirtiendo en toda una hazaña pues no encuentren hoteles ni restaurantes durante sus largos trayectos. La seguridad es otro de los temas que los inquieta.
Los transportadores han asumido una labor esencial para evitar el desabastecimiento. Tuvieron que empezar la semana soportando que los peajes concesionados desacataran la orden de la Nación para suspender el cobro de peajes, situación que finalmente terminó controlándose.
Pero a pesar de ello siguen siendo varios los inconvenientes a la hora de ejercer su labor. Lo primero es que no encuentran hoteles ni restaurantes a lo largo de la carretera para hacer una pausa, lo que evidentemente está haciendo que su labor sea tortuosa.
Lo más grave de todo es que en el norte del país, en departamentos como Magdalena y Cesar, se están presentando situaciones de inseguridad para los transportadores. Denuncian que algunas personas se están atravesando en la vía para hurtar la carga, especialmente si se trata de alimentos.
Por eso insisten en un mayor control policial en las carreteras, pues lo que está en juego no es solo su seguridad sino el abastecimiento en las centrales mayoristas del país.