Una riña habría derivado en el asesinato de un adulto en dicho barrio, así fue como terminó el honorable récord de la capital boyacense sin homicidios.
Esa es una de las hipótesis que manejan las autoridades, que aún no han podido establecer si se trató de una riña, un intento de robo o un ajuste de cuentas. Lo cierto es que la tarde del domingo se cerró con el primer homicidio del año en la capital boyacense.
Al caer la tarde, cayó José Roberto Martínez en una de las aceras del barrio Obrero en el sur de la ciudad. Una certera puñalada bastó para acabar con su vida. Relatan las autoridades, que esta le habría atravesado el corazón.
Quienes estaban en el lugar de los hechos cuentan que José Roberto departía con amigos en un establecimiento comercial de este barrio. Y no fueron los tragos o una acalorada discusión lo que provocó la muerte de Martínez.
El responsable de su deceso es un sujeto conocido como “Yuber” por los vecinos del sector, quien, sin contemplación, clavó la puñalada certera que acabó con la vida de Martínez y con el portentoso registro con el que contaba Tunja.
Fueron 112 días en los que no se registraron muertes violentas en la capital boyacense, que quedaron opacados por la sangre que corrió por las calles del barrio Obrero.
“Yuber”, habiendo cumplido la misión que la parca le encomendó, huyo del lugar de los hechos, dejando no solamente un cadáver tendido en el suelo, sino desolación entre la comunidad del barrio Obrero, que desde hace varios meses no presenciaba una muerte violenta en sus calles.
