El Teatro Popular de Tunja representó a Colombia en el Festival Internacional de Títeres de Angamacutiro, en el estado de Michoacán, México, gracias a una invitación de la agrupación mexicana Arte Damos y al apoyo parcial de una beca de circulación internacional otorgada por la Alcaldía de Tunja. La gira incluyó funciones en comunidades rurales, instituciones educativas y en el teatro de la Casa de la Cultura del municipio anfitrión.
La actriz Lina Fernanda Reyes, integrante del grupo desde la infancia, calificó la experiencia como profundamente transformadora. “Fue una experiencia muy enriquecedora como actriz, como persona y como profesional; me ayudó a ver el arte desde otra perspectiva”, señaló. Destacó además el recibimiento de las comunidades mexicanas: “En Angamacutiro nos hicieron sentir como en casa”.
Desde el componente cultural, los integrantes resaltaron el intercambio con las tradiciones locales. Rodrigo Sánchez, uno de los participantes del viaje, afirmó que “los mexicanos tienen un arraigo muy fuerte por sus danzas, el arte, la pintura, la escultura y el teatro”, así como el valor simbólico de su arquitectura y sus tradicionales pirámides.
Por su parte, Carlos Sánchez, director del grupo, explicó que la gira fue posible gracias a una combinación de apoyos institucionales y recursos autogestionados. “Nos ganamos una beca que nos dio un adelanto de 6 millones de pesos, pero en total la gira costó cerca de 23 millones”, indicó. Los tiquetes aéreos, el hospedaje en Ciudad de México y los traslados hacia Michoacán representaron la mayor parte de los costos.
El director subrayó que, aunque las becas son un respaldo importante, los grupos culturales deben asumir una alta carga de esfuerzo adicional. “Las becas son una ayuda, pero los grupos también tenemos que poner un gran esfuerzo y gestionar recursos”, aseguró. Además, reflexionó sobre las condiciones en las que los artistas viajan al exterior: “Muchas veces vamos con las maletas más cargadas de sueños que de posibilidades”.
«Artedamus y su director el maestro Martin Chaves y todos los integrantes de la comunidad hicieron un gran aporte económico y organizativo en nuestra estancia allá en Michoacán», expresó el director.
Desde la Fundación Cultural Teatro Popular de Tunja, José Alberto Sánchez Quintana resaltó que la gira permitió internacionalizar la cultura local. “Estamos felices de que esta obra nos haya dado la posibilidad de circular internacionalmente, posicionando la cultura tunjana”, afirmó. Las presentaciones se realizaron en instituciones educativas rurales y en un auditorio con asistencia de más de 80 personas.
Las funciones se llevaron a cabo en el Jardín de Niños Guillermo Prieto, en zonas rurales de Angamacutiro, y en el auditorio municipal, donde se socializó el trabajo que el Teatro Popular viene desarrollando en el sector suroriental de Tunja. “Estos vínculos permiten abrir nuevos caminos para las artes y fortalecer alianzas culturales”, agregó Sánchez Quintana.
Carlos Sánchez también cuestionó la carga administrativa posterior a la gira. “La experiencia fue maravillosa, pero la interventoría exige constantemente papeles, fotos, videos, copias físicas y digitales, lo que genera un desgaste fuerte en los grupos”, expresó. Añadió que es necesario revisar si los recursos se entregan de manera oportuna para no afectar los procesos creativos.
La obra “La Ratita Presumida”, adaptada a un contexto barrial y trabajada con títeres de varilla y pértiga, fue el montaje presentado en México. La puesta en escena aborda temas de convivencia y desarrollo comunitario, con un enfoque social construido durante más de dos años de trabajo.
El Teatro Popular de Tunja continuará con su programación cultural en el mes de diciembre, con funciones de títeres, talleres artísticos, música en vivo, farolitos y actividades comunitarias dirigidas a niños del sector, como parte de su labor social en la ciudad.
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