Lyda Naussán se hizo reconocida en la capital boyacense en diciembre de 2017, cuando su propuesta para la marca ciudad fue la ganadora del concurso realizado por la Alcaldía de Tunja. El DIARIO conversó con Naussán para conocer su percepción de la ciudad, qué la llevó a participar del concurso, y que pretende ahora que ‘Tunja Ciudad de Origen’ es oficialmente la marca de la ciudad.
EL DIARIO: ¿Qué la llevó a proponer a Tunja como ciudad de origen?
Lyda Naussán: Soy de Tunja, pero hace tiempo que no vivo allí. En varias ocasiones visité la ciudad, me pasé por el museo arqueológico de la UPTC y por otros museos existentes en Tunja; recorrí mil lugares que ya conocía, pero ahora los analicé con detenimiento. Me di cuenta de que a Tunja se le reconoce como noble, hidalga y leal, pero esas son referencias ligadas a la época de la colonia, y yo quería saber qué era Tunja antes de esa época. Me di cuenta que nosotros éramos mucho antes de la llegada de los españoles, encontré datos como que Tunja fue la primera ciudad en producir un cultivo de trigo; también encontré que Tunja era reconocida como un centro literario y de arte en la época de la colonia.
E.D: ¿Cuánto tardó en realizar y plantear la propuesta?
L.N: Desde que vi el brief me demoré más o menos tres meses haciendo el proceso completo de la marca. Primero pensé en Tunja a la altura, pero luego vi que Bogotá había usado recientemente ese tema para promover su marca. Decidí entonces enfocar la atención por otro lado. Fue un proceso al que le dediqué mucho tiempo, un trabajo muy juicioso.
E.D: ¿Cuál es la idea de que Tunja tenga una marca?
L.N: Es importantísimo que la ciudad tenga una marca. Lo primero que pretende generarse es identidad entre los mismos ciudadanos, pero el hecho de tener una marca abre otro mundo de posibilidades; la ciudad puede visibilizarse ante todo el planeta, lo que promovería el turismo y quizás los negocios.
E.D: ¿Cuál es el siguiente paso en este proceso?
L.N: Creo que el tunjano, el colombiano, y en general el latinoamericano tiene un complejo de inferioridad. Nos creemos menos de lo que somos, y eso es un problema de educación. Me sorprende que la Alcaldía haya hecho este concurso, y agradezco al Alcalde que lo haya hecho porque es el punto de partida para crecer. Pero una marca ciudad, no puede quedarse como una iniciativa de una administración. Es algo que demora en posicionarse, se demora años en consolidarse en el imaginario de la gente, pero es algo que vale la pena fomentar, vale la pena luchar por ello.
E.D: ¿Qué espera de Tunja?
L.N: Espero que sea una ciudad valorada con la verdadera trascendencia que tiene, espero que el tunjano sienta orgullo de serlo, que se genere un imaginario de grandeza entre la misma ciudadanía. También espero volver, para dedicar toda mi preparación al crecimiento de mi ciudad.