La capital de la provincia Norte ofrece una nutrida oferta turística para todo tipo de gustos.
Visitar Boyacá es deleitarse con sus paisajes, admirar sus cultivos que se asemejan a gigantescos tapetes, recibir una sonrisa de su gente y disfrutar de su gastronómica. Estos y otros aspectos hacen que el departamento se convierta en epicentro turístico del centro – oriente colombiano.
Sus 123 municipios tienen algo especial que atrapa, pero, en esta ocasión, la atención se la roba Soatá en la provincia Norte, que por su condición climática se hace acreedor de una nutrida oferta turística, donde se resaltan los hoteles, balnearios, restaurantes y negocios que comercializan dulces a base de frutas, que hacen aún más placentera la estadía en el territorio soatense.
Uno de los símbolos por excelencia del municipio son los dátiles, una fruta típica del norte, que partida en pedazos y caramelizada con azúcar se convierte en una explosión de sabores, e ideal para compartir con amigos y familiares.
También figuran los dulces de limón, los bocadillos y las panochas, que sin duda, son perfectos acompañantes después de haber degustado un delicioso cabro sudado o un buen pescado.
Uno de los puntos que se hace necesario visitar es la Plaza de Mercado, un lugar mágico que reúne olores y sabores del campo soatense con sus dignos representantes, que hace que se paralice el tiempo por un momento. En este sitio se pude disfrutar de platos típicos como la fritanga, caldo de costilla, mute, entre otros.
Por otro lado, se encuentra la imponente catedral en el parque principal, la cual se convierte en un escenario ideal para los devotos y amantes del turismo religioso.
Sumado a los atractivos en mención, se encuentra el majestuoso Cañón del Chicamocha, que adorna el paisaje soatense y se convierte en lugar mágico por descubrir.
Lisseth Torres Manchego, alcaldesa de Soatá, resalta las bondades de su municipio e invita a boyacenses, colombiano y extranjeros a visitar la capital del Norte.
“Contamos con grandes riquezas naturales ideales para el turismo; la calidad de nuestras gentes, la gastronomía y su arquitectura hacen de Soatá un sitio único, mágico y que lo tiene todo. Así que la invitación es para que se pase por nuestra tierra y se enamore de ella”, expresó Torres Manchego.
Así que no se pierda la pierda la oportunidad de conocer parte de la belleza boyacense y lo puede hacer en Soatá, tierra de gente amable y que lo espera con los brazos abiertos.