Presentaron a los sogamoseños y turistas la ruta más deliciosa y tradicional. Este producto típico es tradicionalmente elaborado en junio, durante las festividades de San Pedro y San Pablo y hoy se considera un verdadero patrimonio gastronómico de Sogamoso.
Durante los meses de junio y julio, Sogamoso despierta con el aroma inconfundible de la tradición gastronómica más representativa del territorio: La empanada Sampedrana, un símbolo de la identidad sogamoseña que, además de alimentar a las familias y unirlas alrededor de la mesa, conecta generaciones enteras con su sabor y su historia.
Con el objetivo de mantener viva la preparación de este plato propio de la identidad sogamoseña, la Secretaría de Cultura, Turismo y Patrimonio creó la Ruta de la Empanada Sampedrana, en la que se exaltan los puntos donde se produce este manjar, en su mayoría producido por habitantes de sectores rurales como: La Playita, La Reforma y vereda Monquirá y los barrios Monquirá y La Florida.
El acto de apertura de esta ruta se realizó el sábado en la Plaza de la Villa. Allí los visitantes pudieron probar las diferentes formas de preparación que ofertan las gastrónomas tradicionales, que en su mayoría son mujeres, quienes han recibido la receta de sus madres y abuelas.
Este apetitoso amasijo se prepara con un relleno inconfundible, que mezcla ingredientes salados y dulces, tan versátil como sabroso, que incluye: arroz, garbanzo, carne de pollo y cerdo, longaniza, manzana o pera en almíbar, huevo cocinado, zanahoria y uvas pasas. Luego de ser horneadas, preferiblemente en horno de leña, se espolvorean con azúcar para lograr ese crujido inolvidable que conquista a todos quienes las degustan.
La fabricación de las empanadas ha sido conservada gracias al amor y dedicación de familias que han transmitido su receta de generación en generación.
