Colombia atraviesa un momento delicado. La economía ha crecido anualmente desde 2000, aparte del año en que estalló la pandemia, pero la industria se ha ido contrayendo implacablemente.
Las cuentas externas ayudan a comprender el problema. Existe un déficit en cuenta corriente derivado del déficit de la balanza comercial. Se observa un aumento de las importaciones de insumos y bienes de capital para la industria, bienes de consumo y combustibles y lubricantes. Las exportaciones crecen, pero a un ritmo más lento y en gran medida debido al petróleo y sus productos derivados. Los tres mayores compradores de las exportaciones colombianas son China, Panamá y Estados Unidos.
Sí, se destaca el tema de la “desindustrialización”, pero ¿qué puede hacer Colombia para industrializarse?
“El Estado ejercerá sus funciones de liderazgo para impulsar un proceso de industrialización democrático y responsable, que sea capaz de generar capacidades para el aumento de productividad, el empleo, los ingresos y los encadenamientos productivos necesarios para una transición social y ecológica que estimule la producción de y para la vida”, según al programa de gobierno del presidente Gustavo Petro. “Crearemos una política de aranceles inteligentes que estimule la vida, la generación de valor agregado, la competitividad y la industria nacional. Se eliminarán gradualmente los aranceles en insumos, bienes y servicios que cumplan estas condiciones y se aumentarán donde afecten ese valor agregado, como mecanismo de defensa comercial de los sectores productivos vulnerables a la competencia desleal con importaciones subsidiadas”.
El programa dice que la creación de empleo será el barómetro de la eficacia.
Rodolfo Hernández era el principal competidor por la presidencia y la industrialización del campo era parte de su plataforma:
“Se debe diseñar un enfoque de la producción que permita dar el siguiente paso, que es la industrialización del agro, para que salgamos del sector primario de la economía y nuestros productos brinden el valor agregado por el que se pueda cobrar mucho más”.
El programa también dice que “Un capítulo especial debe tener la agroindustria, por eso en nuestro gobierno se desarrollará una industria que produzca tecnología agrícola.
Punto donde se puede lograr la industrialización y la tecnología de campo.
Colombiano, como explicamos”.
La agricultura es un sector importante de la economía colombiana. Sin embargo, enfrenta desafíos que deben superarse para asegurar su crecimiento sostenible.
Los principales son:
Baja productividad: La productividad agrícola colombiana es inferior a la de los países desarrollados y algunos países latinoamericanos. Esto se debe a la pequeña escala de producción, tecnologías atrasadas y falta de acceso al crédito y asistencia técnica, entre otras razones.
Concentración de la tierra: las propiedades agrícolas en Colombia están concentradas en unas pocas manos, lo que dificulta que los pequeños agricultores accedan a los recursos que necesitan para aumentar su productividad.
Logística: El sector agrícola colombiano enfrenta desafíos logísticos, como la falta de infraestructura de transporte y almacenamiento. Esto dificulta la exportación y el abastecimiento de los mercados internos.
Impactos climáticos: El clima de Colombia se está volviendo más extremo, lo que está afectando la producción agrícola. Las sequías, las inundaciones y los cambios de temperatura dificultan la agricultura.
El antídoto contra la desindustrialización pasa por inversiones, educación y, sobre todo, compromiso político. Colombia tiene todos los recursos necesarios para cambiar la situación.