La Colombia Humana ha estado buscando respuestas ¿es posible que las personas puedan cambiar? ¿es posible que la sociedad colombiana como colectividad pueda transformar lo que se conoce como nuestra realidad por otra que constituyamos entre todos, del trabajo, la ética y la solidaridad.
Gustavo Petro es un dirigente que no solo está proponiéndole al conjunto de la sociedad el reto de pensarnos una sociedad diferente, sino que tiene la virtud de demostrar que sí es posible construir esta nueva sociedad.
Para el dirigente petrista Pedro Pablo Salas, Petro ha retado a la sociedad a romper con el habitus de que esta es una sociedad violenta, y que el candidato ha demostrado que esta es una sociedad ingeniosa, humana, pero que va más allá. Petro ha convocado a revisar la historia y ha logrado demostrar la existencia de una élite histórica dominante, que en estas elecciones está representada por Duque y Lleras, ellos quieren prolongar la historia que hoy es un presente doloroso, de desgarramiento, miedo y desasosiego, incertidumbre ahogando los llamados de justicia, llevándonos a un grado máximo de disociación y nuevas violencias. Según Salas, esta élite histórica nunca tuvo un proyecto de nación una identidad, todo lo contrario a través de la violencia y el fraude electoral, Petro ha demostrado cómo se conformaron en un frente de autodefensa, para concentrar la tierra, el crédito, la educación, convirtieron el precario estado asistencialista, en otro fortín para más acumulación hicieron de la salud su negocios, de la educación un privilegio para sus hijos, la élite destruyó el proyecto de vivir del trabajo honrado, sembró en Colombia la cultura del pillaje, del atajo; en esas condiciones han logrado acumular, mantenerse en el poder, capturaron el estado, lo convirtieron en un instrumento de acumulación de rentas, poder político y más riqueza y desigualdad.
Foto | Carlo Fidel Gómez
Petro ha preguntado ¿tenemos que naturalizar esto, tenemos que aceptar que esto es lo que somos, que menos del 5% de campesinos de Boyacá tengan derecho a crédito bancario para poder producir la comida que nos alimenta? ¿Es normal que en Boyacá una entidad como el Banco Agrario llegue a expropiarle una fumigadora a un campesino en Cómbita y luego proceda a quitarle la tierra? ¿Quiénes son los que destruyeron la vida de los campesinos su vida emocional y familiar mandando grupos de abogados para embargar tierras de campesinos? ¿Quiénes son los expropiadores? ¿Por qué tenemos que aceptar destruir los páramos, el agua, y la biodiversidad para sacar carbón porque así lo decidieron quienes destruyeron nuestra vocación agropecuaria con TLC? Nos expropiaron el derecho a decidir sobre el territorio, ¿por qué aceptar que la población joven no consiga en qué ocuparse, destruir su proyecto de vida, donde el 70% del mercado laboral en Boyacá, esté en la informalidad? ¿Por qué el gota a gota mafioso sea la banca de los humildes emprendedores?
Para el dirigente petrista Pedro Pablo Salas, Gustavo Petro ha retado a la sociedad, ha querido que las vías y puentes en Boyacá, el ferrocarril sea para mover el trabajo de los miles de productores campesinos, que la vía llegue en condiciones favorables para llegar a Cocuy y Güicán, para que los que nos visitan puedan llegar a nuestros territorios, disfrutarlos, compartir una morada campesina, y salir de allí con papa, ganado, alverja, quesos, amasijos etc. Esos son los territorios que queremos construir, territorios para la vida, mercados para todos, no para un puñado de privilegios de multinacionales. Petro está para que resurja el desarrollo a escala local, del minifundio, que la metalmecánica y el acero, y la manufactura vuelva a ser nuestra riqueza, que el saber esté aplicado a estas nuevas económicas de pequeña escala, que el sudor del trabajo honrado sea el dador de vida en los territorios, que nuestras ciudades estén pensadas como goce y disfrute, no como hacinamientos urbanos (modelo Lleras) localización de pobres para el control policial de la juventud desamparada, Petro ha retado a que sí es posible una sociedad integrada, donde riqueza se distribuya, justica y acción colectiva vuelva a ser la ética de nuestro diario vivir.
Para Salas, las élites históricas han asesinado varios candidatos populares a la presidencia o se han robado las elecciones, «por eso este 27 de mayo de manera pacífica vamos a estar en las plazas cuidando que esta élite histórica, no vuelva a robarnos, a jugar con nuestro presente y nuestro futuro, por ello de manera pacífica estemos en las plazas públicas hasta que se cuenten los votos, nuestros votos no los de la registraduría, hasta que Petro hable».
