Luego de la polémica salida de la periodista Mireya Moreno de la dirección del noticiero de la emisora Toca Estéreo de Sogamoso, está ocurriendo una situación que para los colegas y para la opinión pública resulta aún más insólita y hasta con visos de ilegalidad.
Resulta que al parecer la periodista Mireya salió de la emisora por presiones de la Alcaldía municipal, pues ella se atrevió a hacer denuncias sobre situaciones irregulares que se presentan en esa ciudad.
Pues para remplazarla en la dirección del noticiero, desde el pasado primero de febrero fue nombrado el periodista Giovanny Alberto Acevedo.
El asunto no tendría mayor relevancia si no fuera porque Acevedo hace parte de la nómina de la Oficina de Prensa de la Alcaldía municipal y porque el municipio tiene vigente un contrato de publicidad por 60 millones de pesos con la emisora Toca Estéreo.
¿Será que el periodista puede realmente defender a la comunidad, a sus oyentes, en los asuntos que tienen que ver con el Alcalde, que a su vez es su jefe? ¿Es legal que el periodista preste servicios en la Oficina de Prensa y, al mismo tiempo, ejerza como director de un noticiero de radio? ¿Es legal el contrato de publicidad entre el municipio y la emisora, cuando uno de los periodistas de la entidad territorial es el director del noticiero? ¿El periodista recibe salario oficial y al mismo tiempo en una emisora privada le pagan con los recursos provenientes de un contrato de publicidad que también paga el municipio?
El único feliz en esta historia es el alcalde municipal, Rigoberto Alfonso Pérez, que se quitó de encima a una periodista crítica y ahora tiene a su favor, en la emisora más escuchada de la ciudad, a un periodista que hace parte de su nómina.