Jorge Hernando Pedraza, designado como Secretario General de la Comunidad Andina en 2019, usó el cargo para tratar de sobrevivir como el supuesto dirigente que siempre ha pretendido ser. Así como convenció a Duque y al Centro Democrático en Bogotá de ser, en una época lejana, la gran cabeza del Partido Conservador en Boyacá y, engendrar una aterradora alianza política que aprovechó solo para sus propios intereses, hoy aspira recibir aplausos boyecenses por renunciar a un cargo del cual su propia tierra no vio ningún beneficio.
Luego de estar vinculado en procesos como el ‘Carrusel de las Notarias‘ y ‘Agro Ingreso Seguro‘ (donde el mismo Ministerio de Agricultura aseguró que Pedraza fue beneficiario para tres de sus predios en el año 2007), de jugar a dos bandas con los conservadores y el Centro Democrático, y ser el mayor responsable del declive de su Partido en Boyacá, el expresidente Iván Duque lo cobijó para el cargo en la CAN.
Pedraza no hizo nada significativo por Boyacá cuando fue Senador, y, como nada se esperaba de él, durante cerca de cuatro años, nada hizo tampoco por el departamento como Secretario de la Comunidad Andina.
El papel de Secretario debía asumirlo hasta noviembre del 2023; sin embargo, con el gobierno Petro [el que lleva la bandera del verdadero cambio (aunque vaya más lento que seguro)], Pedraza adelantó su salida con la risible disculpa de problemas diplomáticos entre Perú y Colombia.
Hoy, que desvanece el espectro del Uribismo y la colectividad conservadora en el departamento por las deserciones en ambos bandos, y un Pedraza que solo ha demostrado trabajar para cuidar su lonchera, el exsenador caería nuevamente en un vacío político, hasta que la mermelada sea untada.