Para la mayoría de los congresistas boyacenses la respuesta del gobernó Duque a la seguidilla de masacres ha sido desafortunada, y piden dar la importancia suficiente al cumplimiento de los acuerdos de paz.
Luego de la segudilla de masacres de los últimos días, del rechazo ciudadano al presidente Duque durante su visita a Samaniego, y de la salida en falso del Primer Mandatario al comparar las cifras de muertos y masacres durante los ocho años de gobierno de Juan Manuel Santos con los datos correspondientes a sus dos años de gobierno, las voces de rechazo en contra del Presidente vienen en aumento.
Entre esas las de los parlamentarios boyacenses, o por lo menos la mayoría de ellos, que por estas horas se unen al clamor popular de justicia a un gobierno que está destacando por pisotearla.
Para el representante a la Cámara por la Alianza Verde, Wilmer Leal, se trata de una barbaridad sin explicación, en la que el gobierno Duque da por sentado que se trata de un tema de cifras y no del derramamiento de sangre de inocentes.
Leal también sentó postura frente al oportunismo del gobierno Duque de utilizar estas masacres como pretexto para impulsar la idea de las aspersiones aéreas, hecho que calificó como “la estocada final a la paz”.
El representante a la Cámara por el Movimiento Alternativo Indígena y Social (MAIS), César Pachón, fue otro de los más activos a la hora de manifestar su posición en contra de la postura que ha tomado el Gobierno Duque.
Pachón lamentó el espectáculo del Presidente Duque el sábado en Samaniego, municipio al que fue a tratar de elevar su imagen y popularidad, confundiendo esto con presencia del Estado.
Para el Representante a la Cámara por el MAIS también resultó inconcebible la respuesta del gobierno Duque, utilizando las masacres como pretexto para reiniciar aspersiones con glifosato.
Por su parte la senadora Aida Avella hizo una reflexión de mucho peso para el momento coyuntural que atraviesa el país, en la que cuestionó para qué se invierten tantos recursos en defensa si la población sigue desprotegida.
Avella también lamentó que la respuesta estatal vaya a ser el reinicio de las aspersiones con glifosato, que atentan contra el medio ambiente, la economía campesina y la vida.
Rodrigo Rojas advirtió que el glifosato no solucionará la problemática, e invitó al gobierno Duque a apostarle al desarrollo en los territorios.
Por su parte el senador Jorge Eduardo Londoño pidió no se desmantelen todos los esfuerzos que durante años ha hecho la sociedad y los gobiernos por impulsar la paz.
La senadora Sandra Ortiz pidió al Gobierno Duque ponerse al frente de esta barbarie y comprometerse con acciones verdaderamente útiles para la paz.
Otra fue la postura del senador Ciro Ramírez, que relaciona directamente la existencia de cultivos ilícitos y las masacres, dejando en evidencia su complacencia con la respuesta del gobierno Duque, esa que hoy tiene llorando a gran parte del país.