Municipios del Valle de Tenza, líderes en procesos de Ciencia, Tecnología e Innovación

Desde mujeres rurales hasta docentes especialistas, hacen parte de los grupos de investigación del Valle de Tenza. El trabajo mancomunado logró la formulación y aprobación de las primeras políticas públicas municipales en CTeI en toda Boyacá.

Transformar la calceta de plátano en bolsos y accesorios, repensar la minería de la esmeralda y convertirla en un atractivo turístico, darles una segunda vida a desechos orgánicos, son algunas de las iniciativas que se desarrollan en zonas rurales de municipios de las provincias Neira y Oriente del departamento de Boyacá. Estas actividades además de ser generadoras de empleo son iniciativas que le apuestan a la innovación y al fortalecimiento de los procesos en ciencia y tecnología, que antes se pensaba, se acunaban solo en laboratorios y universidades.

Este es el caso de la iniciativa que generó Nohemí Sánchez Buitrago, del municipio de Somondoco quien junto a un grupo de casi 30 mujeres rurales transforman la calceta o tallo de la mata de plátano en materia prima para la elaboración de bolsos, canastos, empaques y accesorios decorativos; su técnica ha sido reconocida como innovación.

Nohemí hace parte de los 46 emprendedores formados en temas de estructuración de proyectos.  Algunos de ellos, organizados en Grupos de Investigación, lograron un primer paso ante el Ministerio de Ciencias para que se les reconozca como grupos de Investigación, según los resultados de la Convocatoria 894 de 2021.

Resultados convocatoria: https://minciencias.gov.co/convocatorias/fortalecimiento-capacidades-para-la-generacion-conocimiento/convocatoria-nacional-para

De acuerdo con lo manifestado por Nohemí, quien representa a Artesanías La Esperanza, los procesos de formación y acompañamiento les han servido para aprender dónde y cómo gestionar recursos, qué es la innovación y cómo hacer captación de clientes. “Hoy nuestros clientes están en Cartagena, Bogotá, Medellín, Cali, Santa Marta y algunos clientes han llevado nuestros productos a Suiza”.

De este modo, cinco municipios boyacenses: Santa María, Macanal, Chivor, Almeida y Somondoco, tienen hoy 18 investigadores más registrados ante MinCiencias (Colciencias) entre los que se cuentan docentes, trabajadores del sector público, empresarios y bachilleres que mediante el trabajo en sus territorios y la práctica de actividades con métodos o resultados no conocidos, buscan el reconocimiento del Ministerio, el apalancamiento de sus iniciativas, la protección del medio ambiente y el fortalecimiento de la Ciencia y la Innovación en sus municipios.

Como parte de su trabajo y gracias al apoyo en capacitación de parte de AES Colombia, estos grupos de personas también formularon los cinco Planes Estratégicos Municipales de Ciencia y Tecnologías para sus municipios, dos de los cuales ya cuentan con el reconocimiento por parte de las autoridades locales y hoy son Políticas Públicas. Esto significa que tales documentos deberán ser consultados e incluidos en los Planes de Desarrollo Municipal, esto para el caso de Macanal y Santa María. Los tres municipios restantes avanzan en dicho proceso de reconocimiento.

De esta manera los municipios de Macanal y Santa María, junto a la ciudad de Tunja, se convierten en pioneros en la formulación de Planes Estratégicos de Ciencia Tecnología e Innovación. El trabajo en los dos primeros estuvo acompañado por C-STAR (Centro de Desarrollo Tecnológico para la Sostenibilidad y Competitividad Regional) que como ente asesor hace un trabajo participativo donde la misma comunidad: propone la dirección que quiere desarrollar para lograr la competitividad, fortalece su capital humano, contribuye con ideas para la conservación de sus territorios y le apunta al desarrollo económico de las regiones.

Dentro de las apuestas trazadas para el año 2036 en los Planes Estratégicos Municipales de Ciencia, Tecnología e Innovación de Santa María y Macanal se encuentran el ecoturismo, el desarrollo de nuevos negocios, el crecimiento del talento humano, la reducción de la migración campo ciudad, el bilingüismo, las energías renovables y la sostenibilidad medioambiental. Estos puntos coinciden con los temas de interés social de la empresa privada en el territorio y por ello AES Colombia apalanca estos procesos de formación y fortalecimiento.

AES Colombia es una empresa dedicada a la generación de soluciones de energía y en la actualidad es la quinta generadora más grande del país. Llegó al territorio hace más de dos décadas cuando adquirió la Central Hidroeléctrica de Chivor y desde entonces ha venido desarrollando soluciones de energía, la más reciente el complejo Solar de San Fernando ubicado en Castilla departamento del Meta.

Buscando afianzar su conexión con el entorno AES ha brindado oportunidades de formación, crecimiento y empoderamiento a las comunidades boyacenses que hacen parte del área de influencia de la Hidroeléctrica y del Embalse La Esmeralda, este último uno de los principales focos de desarrollo turístico del Valle de Tenza.

El caso de Hugo, de 48 años y de cinco familias más de Chivor, es otro ejemplo del trabajo en equipo y el desarrollo de ideas.

Hugo ha trabajado en minas de esmeraldas por más de 20 años, los mismos años que, según dice, “no ha visto violencia en la región, pero sí necesidades. Por eso nuestra comunidad habló con las empresas dueñas de las minas para que hiciéramos un convenio, en donde nos dejaban entrar con turistas para mostrarles el proceso de la minería de esmeraldas y la riqueza de la región; alrededor de eso, montamos nuestro proyecto turístico», afirma.

Hace más de tres años, Hugo y la comunidad empezaron a recibir las capacitaciones por parte de AES y C-Star, “nos han enseñado a direccionar y organizar nuestro trabajo. Ya tenemos más de 560 turistas registrados de diferentes países que han venido a visitarnos y hacer el tour de “minero por un día”. En ese día le hacemos el curso completo, que incluye aprender a diferenciar una esmeralda, los tamaños, fracturas, colores. Entregamos casco y botas y vamos a hacer el recorrido a cielo abierto, después bajamos al socavón donde el turista pasa al puesto del minero por media hora para picar y si encuentra una esmeralda se la puede llevar. Luego salimos al “avío” o almuerzo preparado con productos de la región 100% orgánicos y finalmente vamos al taller de pulido”.

La familia de Hugo y cinco familias más hacen parte de la misma asociación en la que cada integrante cumple una función en la relación con el turista; uno es chef, otro es guía, otro se encarga del hospedaje: “Recibimos grupos hasta de 16 personas, ya nos conocen en redes sociales y por el voz a voz”, menciona Hugo.

“Ahora encontramos un sentido a ese trabajo y lo hacemos en equipo. Llevamos cuatro años trabajando y las expectativas que hay alrededor de esto son muy altas”, menciona Hugo. El apoyo de parte de AES y el trabajo de CStar en la región han generado que la comunidad se sienta valorada y apoyada.   

Pese a que Boyacá hasta el año 2020 contaba con 194 grupos de investigación reconocidos por MinCiencias, no se tenían antecedentes sobre el tema en municipios del Valle de Tenza, de modo que estos cinco grupos de investigación son hoy pioneros y únicos entre los municipios de sexta categoría en todo el departamento. 

Su trabajo entonces está ahora en camino a lograr reconocimiento en una segunda etapa por parte de Minciencias. Estas iniciativas y sus protagonistas son ejemplo para demostrar que si es posible materializar las ideas y trabajar de forma amigable con el medio ambiente.