La Procuraduría destituyó e inhabilitó por doce años a Jesús Antonio Barrera por presuntas irregularidades en contratación.
Un nuevo escándalo político se generó en el departamento producto de una nueva inhabilidad y destitución dictada por la Procuraduría. Esta vez, Jesús Antonio Barrera, exalcalde del municipio de Santana, estará fuera del escenario político – administrativo por 12 años producto de una investigación que lo relaciona con malos manejos en el proceso de un contrato de obra por valor de $136.778.804 de pesos, ejecutada durante su administración en el periodo 2012 -2015.
La Procuraduría demostró que “el disciplinado estableció condiciones restrictivas y discriminatorias que impidieron la libre concurrencia de oferentes en el pliego de condiciones dentro del proceso de selección abreviada de menor cuantía, adelantado con el objeto de adecuar y efectuar mantenimiento a los establecimientos educativos del municipio de Santana”.
Además, el Ministerio Público recordó que “la labor del disciplinado no se limitaba a un actuar formal dentro del proceso contractual, dado que sus funciones como representante legal y ordenador del gasto lo conminaban a garantizar que los oferentes concurrieran en igualdad de condiciones a la licitación pública”.
Para la Procuraduría, se vulneraron el principio de transparencia consagrado en el artículo 24 de la Ley 80 de 1993, y el deber de selección objetiva previsto en el artículo 5 de la Ley 1150 de 2007.
La conducta de Barrera fue calificada como gravísima cometida a título de culpa gravísima.
La decisión de segunda instancia fue proferida por la Procuraduría Regional de Santander.