Los concejales escucharon atentamente la socialización que hizo el Secretario de Tránsito del estudio por medio del cual se llegó a la determinación de extender el pico y placa, sin embargo, las dudas sobre su conveniencia persisten.
John Alexander Herrera, secretario de tránsito de la capital boyacense, cumplió la cita acordad con los concejales de la ciudad, pues días antes le habían solicitado socializar el estudio, por medio del cual se llegó a la conclusión de ampliar el pico y placa, antes de que la medida empiece a regir con sanciones económicas.
Herrera estuvo desde muy temprano en el recinto, primero dando a conocer la necesidad de aprobación de 100 millones de pesos para realizar el estudio de rutas urbanas de transporte público en zona de influencia de la nueva terminal de transportes.
Pero el punto álgido de la jornada fue la socialización del estudio en el que se basó la decisión de extender pico y placa. Socialización de la que Herrera no salió bien librado del todo.
“Nos hablaba que el 54% de los conductores de servicio público estuvieron de acuerdo con el pico y placa en la ciudad, el 38% no; mi compañero Juan Camilo (Morales) también lo decía, y vuelvo y lo reitero, la encuesta para mí fue solo para los conductores mas no para el público en general. Entonces, efectivamente, el transporte público colectivo urbano, tengo entendido, no tienen pico y placa, entonces ¿cómo no van a estar de acuerdo con la medida si ellos no se están afectando?”, cuestionó el concejal Rafael Rojas.
Pero los cuestionamientos del concejal liberal no terminaron allí, pues seguido a esta primera pregunta vino una cascada de dudas del concejal que no pareció muy conforme con lo expuesto en el estudio. “No estoy diciendo que el estudio que nos presenta esté malo, pero pensaría yo que debería ser más respnsable en los tiempos en que se ha hecho. Las encuestas se hicieron, tengo entendido, el 14 y 15 de septiembre del año 2017, de las dos de la tarde a las seis de la tarde, efectivamente, pienso también que se han debido realizar estas encuestas durante todo el día para medir realmente la movilidad (…) hablamos también de un estudio medio ambiental, a mí me gustaría que ese estudio hubiese sido avalado por Corpoboyacá para basarnos en cifras y datos reales, lo mismo que el estudio socioeconómico de la ciudad, pues efectivamente se están afectando muchísimas personas; eso no es capricho nuestro”
Rojas agregó que no son solo los habitantes de Tunja los que se están viendo afectados con la impopular medida de extender el pico y placa. “Se están afectando también los municipios cercanos a Tunja, entre estos Cómbita, Soracá, Oicatá, Cucaita, Puente de Boyacá”.
Y Rojas no fue el único cabildante que hizo una lista de aclaraciones y de peticiones, otro que se hizo escuchar fue el concejal Juan Camilo Morales, quien le hizo una serie de observaciones al Secretario de Tránsito. “Dentro del estudio de movilidad que realiza la UPTC, no vi el impacto que se desarrolla en los barrios, se tocó tal vez lo del barrio los Muiscas, lo del Santa Inés, pero como tal no se hizo un estudio pormenorizado de los barrios como tal. Tunja tiene aproximadamente 265 barrios y la movilidad en cada uno de esos barrios es diferente, entonces, a mí me gustaría saber qué análisis realizó la Secretaría de Tránsito para ajustar esa medida de pico y placa para los barrios de la ciudad. Otro de los factores que yo había solicitado en el primer estudio que se realizó del pico y placa fue el estudio medio ambiental, pues aquí observamos que hay un estudio medio ambiental pero yo, como exfuncionario de Corpoboyacá, en alguna oportunidad tuve la posibilidad de conocer esos estudios de calidad del aire donde se señalaba que Tunja tiene la mejor calidad del aire del país (…) por eso me gustaría que dentro del decreto, dentro de la motivación de este proyecto de pico y placa, ese estudio medio ambiental hubiera sido agregado por Corpoboyacá, que es la autoridad competenten en ese tema de evaluación de calidad del aire; en este hay un estudio pero no veo que esté avalado por esa entidad o por otra como tal”.
Morales agregó observaciones sobre las encuestas, el modo en que fueron realizadas, el público objetivo, entre otros factores que determinan su validez. “¿Cómo se hicieron esas encuestas? ¿A quién se las hicieron? (…) yo pienso que ese era el valor más importante para la mtivación del proyecto de acuerdo, preguntarle a la ciudad, tanto antes como ahorita que se implementó la medida, ¿qué está pasando con el pico y placa? ¿Cómo es la percepción de la ciudadanía respecto a esta implementación?; que se hagan las encuestas y que nosotros las conozcamos también. Realmente es triste que nosotros, como representantes d ela comunidad, hasta este año nos dimos cuenta de la implementación del pico y placa”
Y por supuesto que Morales no fue el único a quién tomó por sorpresa la noticia de la extensión del pico y placa, pues la falta de socialización con gremios y con la comunidad en general fue otra de las observaciones que se le hizo al Secretario de Tránsito.
La Administración Municipal, por su parte, asegura que si se socializó, que se hizo a través de redes sociales el pasado 22 de enero a través de una transmisión en vivo en la que se contestó a varias preguntas de la ciudadanía, destacando principalmente la situación de las personas con movilidad reducida
Pero dicho modo de socialización no dejó conforme a la ciudadanía, y mucho menos a los cabildantes, que hicieron esa observación en la sesión en la que Herrera fue el principal apuntado.
El concejal Camilo Hoyos no quiso entrar en polémicas frente a la validez del estudio, pero si cuestionó el modo en que la Alcaldía implementó la medida, pues en cierta medida fue a traición, fue sin el consentimiento del Concejo, que es la representación de la ciudadanía. “El Concejo Municipal no tuvo conocimiento previo, jamás, de esta medida, que fue un decreto, no un proyecto de acuerdo; nunca se puso en estudio de esta corporación, ni se socializó hasta el día de hoy”.
Pero si Herrera no encontró calma con los cuestionamientos de los concejales Rojas, Morales y Hoyos, menos pudo hacerlo durante la intervención del concejal Anderson Mendivelso, quien incluso llegó a llamarle la atención por la falta de atención prestada a las observaciones de los cabildantes por dar prioridad al chat de su celular.
Mendivelso no solo cuestionó el tamaño de la muestra del estudio, que alcanzó las 69 encuestas, la temporalidad de su realización, siendo que fueron hechas durante horas valle, sino que además hizo observaciones sobre los lugares donde se hicieron, el tiempo dedicado a las mismas, la ausencia de análisis sobre el impacto socio económico que podría haber generado una decisión así. “Los ciudadanos no somos conejillos de indias”, recriminó Mendivelso al Secretario de Tránsito.
Y para cerrar su intervención, el cabildante de oposición requirió no que se le hagan modificaciones a la medida de pico y placa extendido, sino que se derogue tal y como empezó a regir con el decreto expedido el pasado 15 de enero, de modo que quede igual a como estaba el año pasado, o que en su defecto se aplique pero solo en horas pico.