Los 87 kilómetros de vía que el concesionario de la BTS le devolvió al Gobierno y por los que nadie responde

Foto | Luis Lizarazo García / Vía El Tiempo / Archivo
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El congresista Wílmer Castellanos lanzó una alerta sobre lo que está ocurriendo con la concesión de la doble calzada entre Briceño y Sogamoso y anunció un debate de control político en el Congreso. Adicionalmente, solicitó a la Agencia Nacional de Infraestructura y al Concesionario que se postergue el cierre de una calzada del puente El Sisga, en donde se realizarán obras de mantenimiento de esa infraestructura.

La falta de planeación y la improvisación en las políticas del Gobierno con la carretera más importante del departamento, la doble calzada hacia Bogotá, están generando problemas de falta de recursos para el mantenimiento de la vía.

Así lo dio a conocer en las últimas horas en representante a la Cámara Wílmer Castellanos, quien denunció que en el 2021 fue firmado un otrosí al contrato de concesión de la vía, en el que el Concesionario le devolvió a la Agencia Nacional de Infraestructura 87 kilómetros de vía, en los tramos de Villa Pinzón a Tunja (53,9 kilómetros), el paso de la variante de Tunja (8,1 kilómetros) y los tramos entre La Ye en Tibasosa y Sogamoso (13.61 kilómetros) y La Ye-Nobsa-Puente Blanco (13,52 kilómetros).

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“No entendemos como la Agencia Nacional de Infraestructura pudo haber firmado ese otrosí, lo que significa un millonario detrimento presupuestal para la Nación, con el agravante de que el concesionario no está obligado a responder con los recursos para el mantenimiento de esos tramos”, dijo Castellanos, quien anunció que está preparando un debate de control político en el Congreso pues debe haber una explicación de los motivos de esa decisión.

Según Castellanos, es muy curioso que el concesionario de la BTS hubiera devuelto el tramo de la vía entre Villapinzón y Tunja, pero no hubiera incluido el peaje Albarracín.
Dice el Congresista que, en virtud de ese otrosí, el concesionario no está haciendo mantenimiento en los tramos devueltos a la Agencia de Infraestructura y esa entidad tampoco realizó oportunamente las gestiones ante el Invías para que a su vez le recibiera esos trayectos, razón por la cual hay sectores de la vía en muy mal estado, como por ejemplo entre Villapinzón y Ventaquemada.

Además del mantenimiento, el Invías debe ser el responsable de la prevención y manejo de deslizamientos, de la señalización vertical y horizontal y de prestar los servicios de atención en las vía con grúas y ambulancias.

Asegura Castellanos que la problemática de toda la vía concesionada, desde Briceño hasta Sogamoso, es muy grave porque se trata de una carretera con una velocidad de diseño de 80 kilómetros por hora pero con una velocidad de operación de 100 kilómetros por hora, lo que genera altos índices de accidentalidad.

Sobre el otrosí con el que el concesionario le devolvió a la Agencia Nacional de Infraestructura varios tramos de la vía, Castellanos indicó que ha realizado gestiones ante el Gobierno y es así como han destinado partidas presupuestales con las que se está haciendo algún mantenimiento, pero que esos recursos no son suficientes.

De otro lado, Castellanos le solicitó en las últimas horas al Gobierno y al concesionario de la vía Briceño-Sogamoso que postergue las obras de mantenimiento que proyecta en el puente El Sisga, y que producirán el cierre de una calzada de la vía en ese sector durante seis meses.

“Le hemos solicitado al ingeniero Francisco Gnecco, gerente de la concesión BTS y a la ANI que se aplacen estos trabajos para después del 20 de enero”, enfatizó el representante Castellanos.

“Lo que nos han respondido y se han comprometido –indicó Castellanos- es que a partir del 5 de noviembre y hasta el 5 de diciembre realizarán una intervención con estudios de patología para revisar a través de estos estudios si el puente tiene algún riesgo”.
Si no detecta ninguna anomalía grave, ningún riesgo de transitabilidad, las labores de mantenimiento se aplazarán para realizarse después del 20 de enero de 2025.

Dijo adicionalmente Castellanos que lo que busca con esa petición es que esos trabajos no afecten a miles y miles de boyacenses y turistas que llegan a visitar al departamento en la temporada navideña.

Recordó finalmente el Congresista que la temporada decembrina y de año viejo está siendo esperada con ansiedad por sectores como el hotelero, el gastronómico, el artesanal y el comercio en Boyacá, pues se trata de la mejor época, cuando se podrían recuperar de un año complicado en materia de ventas.

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