Es curioso que Santos en esta última etapa del gobierno, ya solo, sin la compañía de ningún dirigente político de la región, sin ninguno de sus ministros a su lado, en medio de la soledad de la provincia, haya resuelto arremeter contra el régimen de Nicolás Maduro, contando que en la mañana de este sábado había pedido, por Twitter, al presidente Trump que en el diálogo que este tendrá con el presidente Putin, en Helsinki, le pidiera que le retirara el apoyo a Maduro, para que ese ‘tirano’ cayera. Para apoyar su argumento, citó la Carta de Jamaica, el famoso texto de Bolívar de 1815 donde el Libertador describe la deplorable situación de su patria, ante las torpezas y atropellos de los que la dirigían en aquél entonces.
Y es que la situación venezolana, funcionó para los intereses de Uribe y de Santos, de modo casi perfecto. Fue gracias al manejo del término castrochavista, en el sentido que supieron usarlo los uribistas, que ganaron las elecciones de este año en Colombia; mientras que Santos, en el frente externo, supo sacar el mejor provecho de su antagonismo con Caracas, para posicionar su criterio contra el régimen de Maduro, siendo parte desde el grupo de Lima de la mayor oposición, junto con el secretario general de la OEA y para impulsar el marchitamiento de Unasur; mientras que el mismo Santos impulsó dos decisiones que han pasado sin el mayor análisis y sin discutir sus consecuencias, en la política exterior del país: su inclusión en OCDE, cuyas consecuencias para muchos no son el cúmulo de beneficios que propagó el gobierno para lograr la favorabilidad de la opinión, y la inclusión del país como miembro global de la OTAN, el tratado militar del Atlántico Norte, una organismo que nada tiene que ver con los países del hemisferio sur y que para la comunidad de naciones latinoamericanas, la membresía de Colombia es vista ahora como una auténtica traición.
Así que la última visita de Santos a Boyacá no fue, ni mucho menos, la más afortunada.
Este panfleto y su escrito no son más que una alta demostración de baja inteligencia y estupidez absoluta. Lo Siento mucho por mi Boyacá del alma que haya gente tan retrógrada, reaccionaria e ignorante que solo transpira cizaña y usa este espacio para denigrar, desconocer y agredir al que la historia terminará por reconocer como el más grande estadista de Colombia y el mejor presidente que haya llegado a tal jefatura.
Lo único afortunado acá es que quien lo escribe ni su nombre se atreve a dar por lo demás ojalá se utilizara mejor este medio y diera espacio a la gente pensante, doliente y abierta de mente para que trate los temas con altura, conocimiento de causa, argumentación y buen juicio, que estoy seguro la hay en Boyacá.
ESTOY DE ACUERDO CON EL COLUMNIASTA NESTE PRESIDENTE NO FUE NI UNCA LO FUE AMIGO DE BOYACA. NO LE DEJO NADA , NINGUN RECURDO A BOYAC SOLO PROMESAS Y QUEJAS REPROCHES Y RECLAMOSLO MISMO QUE SOLA BULLA Y POCO DE PALETAS M,ENOS INVERSION PARA BOYACA, ESTE PRESIDENTE NO SIRVIO PARANAOTROS 8N AÑOS PERDIDOS PARA BOYACA Y GUAL QUE LOS ANTERIORES.