Un obelisco de 7.5 toneladas y 14.5 m de altura, construido con material de armas que fueron entregadas por grupos paramilitares y fundidas en Sogamoso, ratifica el compromiso de Boyacá con las víctimas y la construcción de un futuro seguro y en paz para las nuevas generaciones.
Este jueves 27 de diciembre fue un día memorable para Puerto Boyacá. En una época de unión, paz y reconciliación, el gobernador Carlos Amaya, el alcalde de la ciudad, Oscar Botero y representantes del gobierno nacional, inauguraron el monumento público para la conmemoración, visibilización y restablecimiento de las víctimas del conflicto armado en Colombia, en el parque Jorge Eliécer Gaitán de Puerto Boyacá, construido con 13 mil armas fundidas de las AUC.
“Entregamos un monumento construido con armas fundidas de paramilitares, en memoria a víctimas, ejemplo de paz y reconciliación para el país y un llamado a no repetir la guerra. Invertimos en esta obra porque sabemos que hoy más que nunca hay esperanza en esta tierra”, dijo el gobernador de Boyacá, Carlos Amaya. Agregó que Puerto Boyacá ahora será la ciudad capital de la reconciliación, después de haber sido conocida como la capital antisubversiva de Colombia.
En el acto, la secretaria de Desarrollo Humano, Adriana Camacho, destacó que “esto para nosotros, como Gobierno de Boyacá, es una medida de satisfacción en cumplimiento de la Ley de Víctimas que el gobernador Carlos Amaya ha asumido con total responsabilidad y que, en apoyo con la Unidad de Víctimas, ha permitido que $4.000 millones se hayan invertido en proyectos productivos para la generación de ingresos de las víctimas en Boyacá”.
Por su parte, el alcalde de Puerto Boyacá Óscar Fernando Botero dijo: “Un evento muy importante para visibilizar toda la problemática que tuvimos en los años anteriores al 2006, con la desmovilización y lo que queremos resaltar es la transformación de nuestro municipio después de este hecho y que no se ha vuelto a presentar”.
El monumento construido por el boyacense José Cristiano Barrera, además, lleva grabada la frase ‘Perdonar el pasado es darle una oportunidad al futuro’, recordando el compromiso de todos los boyacenses y colombianos con las víctimas del país.
