El hecho empresarial del mes en Tunja: la presencia de Pan Pa’Ya
Comenzó marzo en Tunja con la apertura de una nueva tienda de esta prestigiosa cadena de panaderías, haciéndolo en uno de los lugares emblemáticos del centro de la ciudad, bajo el convencimiento de que el mejor sitio para el desarrollo futuro del comercio está en el Centro Histórico que deberá seguir como el eje articulador y de identidad de la capital boyacense para el disfrute de sus pobladores y visitantes.
Como en Cartagena o Popayán, el centro de Tunja ofrece un gran potencial de desarrollo de los proyectos más exclusivos y exitosos de la ciudad; y, para este caso, la nueva tienda de Pan Pa’Ya, abrió sus puertas en las instalaciones del Hotel Boyacá Plaza, de la mano de la familia Acevedo, quienes siempre ha confiado con sus inversiones en esta capital.
La historia de una gran marca
EL DIARIO habló con Pedro Felipe Estrada, el líder de la cadena de tiendas Pan Pa’Ya, un nombre que por ahora no dice nada en Boyacá pero que se puede volver muy familiar en el inmediato futuro a través de esta marca con la reciente inauguración de su primera tienda en Boyacá ubicada en el centro de Tunja, que hoy es considerado como uno de los más estratégicos, en la calle 18 con carrera 11.
Pan Pa’Ya nació hace 30 años como una pequeña panadería de barrio en Bogotá y que luego, un grupo de empresarios amigos, hace 27 años, compró esa pequeña panadería, en el conocido barrio Pasadena de Bogotá, con el sueño, desde ese momento, que fuera la cadena de panaderías más grande de Colombia. “De entrada lo pensamos, porque digo que uno siempre debe pensar en grande, hemos trabajado muy duro y hoy lo logramos: estamos en ocho ciudades del país, con 63 tiendas, y cuatro tiendas en Estados Unidos”, precisa Pedro Felipe.
La cadena de tiendas ha prosperado y ha crecido de manera muy positiva, generando hoy en día 1200 empleados directos y más de 2000 mil indirectos; ya el negocio no es solo una panadería; ahora se define como el Bakery, Café, Restaurante, Pizzería, convirtiéndose en fuerte competidor de las pizzerías en Colombia, de igual a igual con las cuatro multinacionales presentes, vendiendo pizzas de 16 sabores, que han resultado de enorme aceptación en el mercado. Otro de los factores de diferenciación de la cadena en Bogotá, es su fortaleza en el ámbito de los domicilios, que ya superan los 40 mil mensuales, atendidos por más de 200 domiciliarios, quienes reparten pedidos todo el tiempo, desde las siete de la mañana a las 9 de la noche.
Confianza en Tunja y Boyacá
Pedro Felipe no oculta su satisfacción y confianza con la llegada a Tunja: “vemos un gran potencial acá. Mucha gente nos decía y cuándo van a llegar a la ciudad; personas en Bogotá, que dicen, ‘nos hace falta el pan de Pan P’ayá en Tunja’. Así que en este primer momento en que estamos inaugurando esta tienda, hablando con clientes, me dicen: los conocemos en Bogotá, por qué no habían llegado antes, el roscón es muy rico, la almojábana es deliciosa, esto es muy satisfactorio”.
Ubicados en el hotel Boyacá Plaza, empresa de la Familia Acevedo, Pan Pa’Ya espera atender toda la ciudad, especialmente con los domicilios, que cubrirán toda la capital, bajo el eslogan: “de la puerta del horno a la puerta de su casa”. Se trata del pan caliente que muchos consumidores quieren al despertarse un domingo; por ejemplo, el producto estrella, el pan trenza, relleno de queso, para saborear con el chocolate, que es una delicia, sin salir de la casa; o si lo prefiere, el cliente puede saborear un delicioso caldo. Pan Pa’Ya se lo va a llevar cuando lo quiera, es el objetivo de la marca en Tunja.
Con la vanguardia tecnológica
Los que están familiarizados con la marca en Bogotá, aquí en Tunja encontrarán los mismos productos y servicios. Pan Pa’Ya, es pionero en Colombia de la tecnología de ultracongelación, traída de Europa, que permite tener productos crudos congelados, hechos en su propia planta, para llevarlos a nivel nacional e internacional, – se exportan a Estados Unidos y a España- como si estuvieran recién horneados donde se han van a vender. Lo que más le interesa a la gente es tener un producto fresco, delicioso, calientico en el momento en que se va a consumir. La garantía, dice Guillermo Rodrigo Acevedo, responsables del manejo de la tienda en Tunja, es que el mismo roscón de arequipe, delicioso, se lo comen aquí en Tunja, en Cartagena, en Bogotá o en Miami. Esta es la promesa de valor: el producto siempre está recién hecho. El secreto es que la empresa cuenta con la tecnología adecuada para tener la estandarización necesaria.
Los precios
En cuanto a precios, la compañía señala que en Bogotá las cosas son un poco más caras porque los costos también son más altos, empezando por los arriendos. Para el caso de Tunja se ha definido una estrategia de precios acorde con la ciudad, con la oferta de promociones permanentes muy especiales en pan y en pizza. Una pizza, por ejemplo, la que se denomina megaeconómica, de 22 centímetros, que vale $5.900 y que con ella almuerza una persona y hasta dos, es algo muy económico. La idea es competir con los precios de la plaza, con todos los productos del día: desayunos, medias nueves, el almuerzo, (pizzas, en la variedad ya comentada, sánduches, calentados, lasañas y cremas de pollo y tomate, entre otros); las onces y la comida, que por nuestra variedad de productos puede ser pizza, o una lasaña, una ensalada, o un panzerotti.
El mejor café
El café, que es para cualquier hora del día, es un café Premium, es un café que el año pasado en París ganó dos medallas de oro en el campeonato mundial de cafés especiales, y el año antepasado ganó una medalla de oro y una de plata, lo que es una garantía. Para garantizar la calidad día tras día, la tienda en Tunja cuenta con una barista profesional que entrena al personal en la preparación del café para que se sienta la diferencia con un café bien preparado. En cuanto al precio del café, “estamos por debajo de Juan Valdez y de Oma que también está aquí en Tunja; hicimos un estudio de mercado y lo que garantizamos es que somos muy competitivos; desde luego, no competimos con las panaderías de barrio porque es muy difícil, porque la calidad y los costos nuestros no nos lo permiten, pero sí competimos con el resto con calidad y con servicio”, enfatiza el dueño de la cadena.
El socio local y su confianza en el centro de la ciudad
Guillermo Rodrigo Acevedo, de la nueva generación de la familia Acevedo, los socios locales de este proyecto en Tunja, expresa que esta es una nueva oportunidad para que la ciudad siga creciendo y desarrollándose, es traer nueva empresa, porque creemos en Boyacá, creemos en el empleado, en las personas, que en Boyacá hacen las cosas bien y que se merecen los mejores productos y las mejores marcas para la ciudad; esperamos que podamos seguir expandiéndonos dentro del departamento, generar más empleo y apoyar el crecimiento, que creo es lo importante”.
En cuanto al Centro de Tunja, pienso, agrega Guillermo Rodrigo, que tiene el mejor potencial desde el punto de vista turístico. En la medida que van llegando estas marcas, la gente de afuera se va a sentir más a gusto y eso ayudará a que el Centro vaya desarrollando su vocación.
Pero advierte que a esto hay que invertirle, porque el futuro de la ciudad está en el Centro, a partir de la parte religiosa, y del patrimonio arquitectónico y cultural; que la gente encuentre opciones de comida, de comercio, fortaleciendo todo lo que está pasando en el centro, el mensaje es: creemos en el centro, creemos que aquí está el desarrollo de Tunja, finaliza Guillermo Rodrigo.