El espectáculo natural que daba un grupo de garzas en sector rural de Tibasosa llegó a su fin por lo que sería la tala no autorizada de árboles.
Aves migratorias que se posaban en zona rural de Tibasosa, en la recta San Rafael, fueron «desalojadas», según denuncias de la comunidad, por lo que sería una tala no autorizada de árboles en el sector.
Los hechos se habrían dado este miércoles 1 de junio en versiones que se dieron a conocer a un medio de comunicación especializado en temas ambientales, «entreojos.co validó esta información con el subdirector de Recursos Naturales de esta autoridad ambiental, Heiler Martín Ricaurte. El funcionario dijo que en efecto la Alcaldía de Tibasosa solicitó permiso de aprovechamiento forestal por seis árboles.
Como respaldo, el gobierno local describió , informó Ricaurte».
La investigación da cuenta de que «por recomendación del Comité Local de Gestión del Riesgo, la administración municipal solicitó un permiso de aprovechamiento forestal a Corpoboyacá con el propósito de derribar seis ejemplares de eucalipto dado su avanzado estado de deterioro».
La situación tendría cierto grado de justificación una vez consultada una fuente oficial, “ dijo Daniela Nausa Patiño, secretaria de Desarrollo y Medio Ambiente de la Alcaldía, y argumentó la decisión en la necesidad de evitar una ”.
Habría añadido que, previa autorización de Corpoboyacá, el municipio procedió a «realizar la tala y poda de árboles”.
Lo cierto es que con la irrupción de una motosierra el espectáculo natural de la bandada de garzas, que se cuenta era de varias especies muy populares en la Orinoquía, que se había vuelto costumbre y llamativo de ver, llegó a su fin, historia que se repetiría luego de varios años.
«Aunque el subdirector de Recursos Naturales de Corpoboyacá admitió la existencia del trámite realizado por la Alcaldía, fue categórico al señalar que cuando los operarios estuvieron frente a la fila de árboles , talaron más de los autorizados».
Una vez conocida la denuncia, «se ordenó el desplazamiento de la Unidad de Reacción Inmediata de la Corporación para inspeccionar el hecho, y ante le evidencia del daño provocado tanto a la flora como a la fauna debió intervenir un equipo de veterinarios para rescatar a algunas garzas con sus pichones mal heridos».
En el relato se cuenta que ante su estado de maltrato debieron trasladarlos al Hogar de Paso de Fauna Silvestre de la Fundación Universitaria Juan de Castellanos en Soracá.
“, ratificó Heiler Martín Ricaurte y calificó la situación como lamentable e indignante, añadió».
Sin embargo, la versión de Ricaurte contradice a la entregada por la secretaria de Desarrollo y Medio Ambiente de Tibasosa, quien habría señalado “que los árboles que fueron intervenidos no tenían nidación”.
Así mismo, «Ricaurte informó además que a partir del reporte técnico entregado por la comisión desplazada al lugar se iniciará el proceso sancionatorio en contra de los presuntos infractores, y se le entregará un balance de la situación a la Procuraduría Regional que ya conoció del caso».
Sobre la responsabilidad de la Alcaldía de Tibasosa, «el funcionario se abstuvo de hacer una sindicación específica y, en el marco del manual de procedimientos, sostuvo que la Corporación evaluará las condiciones de modo, tiempo y lugar de acuerdo con los datos recolectados en campo».
Finalmente, «entreojos.co conoció que varios ejemplares de garzas fueron a refugiarse en árboles ubicados dentro de fincas cercanas, una situación que podría dar pie a un conflicto humano – animal en esta zona del Valle de Iraka. Pidieron a la autoridad ambiental emprender acciones para proteger la integridad de las aves migratorias».