Bogotá D.C. 8 de Marzo 2018
Le agradezco Pedro su amable invitación y pasó a referirme a un tema que no pierde vigencia: el nuevo valor de las matrículas de la UPTC.
Un fallo del Consejo de Estado ordenó a la UPTC que el valor de las matrículas se fijara teniendo en cuenta las condiciones socioeconómicas del estudiante. De acuerdo con ese fallo, el Consejo Superior determinó que para los nuevos estudiantes de los programas de pregrado , el valor de las matrículas se fijara con base en el estrato socioeconómico, los ingresos y el colegio donde hubieran cursado su bachillerato.
Consideramos sano y justo que quienes más tienen más paguen y que los estudiantes más pobres paguen menos de lo que vienen pagando, para que puedan ingresar a carreras como medicina, ingenierías y otras muchas, cuyo valor de matrícula es tan alto que para ellos es imposible estudiar esas carreras.
Para concretar el valor de las matrículas, la UPTC contrató un estudio con la Universidad Nacional, el cual presentó cuatro escenarios: unos permitían mantener la estabilidad financiera de la Universidad, su ritmo de crecimiento y de mejora de la calidad de la enseñanza y lo defendimos cuatro Consejeros, con sólidos argumentos y cifras ciertas. Los restantes miembros del Consejo, entre quienes estaban el Gobernador y los delegados del Gobierno Nacional, eran partidarios del escenario que bajaba al mínimo el valor de las matrículas y señalaban que cualquier déficit que se generara fuera atendido por el Gobierno Nacional y el Dpto. de Boyacá. Los cuatro Consejeros, mantuvimos con firmeza nuestra posición de crear condiciones para facilitar el ingreso a la UPTC de los estudiantes más pobres, argumentamos que ese apoyo anunciado por los delegados del Gobierno era incierto y demostramos que el escenario propuesto defendido por ellos generaría, en un periodo de diez años, un déficit acumulado de más de ciento ochenta y dos mil millones de pesos, que llevaría a la UPTC, no solamente a no seguir creciendo, sino a cerrar carreras, reducir cupos y desmejorar el Bienestar Universitario, situación en la que los más afectados serían precisamente los estudiantes más pobres de Boyacá, para quienes la UPTC es la única Universidad pública donde pueden estudiar. Hubo amplia discusión al respecto y finalmente se impuso la posición de los funcionarios gubernamentales.
Han transcurrido tres meses desde que se aprobó el nuevo valor de las matrículas para los nuevos estudiantes de los programas de pregrado y la UPTC no ha recibido un solo peso de los recursos anunciados por los funcionarios. La Universidad ha entrado en una etapa de incertidumbre financiera, con múltiples implicaciones.
Mientras tanto, un candidato a la Cámara de Representantes se ufana en su campaña publicitaria de que su partido, hoy gobernante en Boyacá, haya logrado la rebaja de las matrículas de la UPTC, sin explicar las consecuencias en el presente y principalmente en el mediano plazo de esa equivocada determinación. Esta utilización politiquera de decisiones tomadas por la universidad debemos rechazarla, como también la indebida intromisión del Gobernador, hace pocos días, en concurridos actos públicos en las instalaciones de la UPTC, para hacer entrega de becas, en flagrante violación de la Ley de Garantías Electorales.
Del Señor Director atentamente, Juan B Pérez Rubiano, representante de los Ex Rectores en el Consejo Superior de la UPTC