Este guatecano lidera una importante y benéfica iniciativa en la capital del país, la cual consiste en llevar alegrías y felicidad a los niños de las zonas más pobres de Bogotá. Su idea que nació años atrás busca que, en las fechas más significativas para los niños como la navidad o el halloween, reciban un regalo y un refrigerio, ya que el lugar donde reciden, padece necesidades y sus familias no tienen la oportunidad de brindarles un detalle.
EL DIARIO: ¿Cuándo decide interesarse por los niños de escasos recursos?
Jorge Luis Camero: Para diciembre de 2015, una amiga me invitó a donar un regalo para la navidad en el barrio mirador de la estancia, allí comprendí la importancia de ayudar a los demás. Luego para abril de este año me puse en contacto con una persona del barrio ya mencionado, quien es la encargada de trabajar por los niños y me brindó el espacio para compartir con ellos. La idea es llevarles a parte de regalos, felicidad que es lo más importante.
E.D: ¿Quiénes los apoyan en esta bonita labor?
J.L.C: Yo siempre soy el que encabezó estas actividades, me encargo de convocar gente que también esté interesada en ayudar a los demás, en promedio siempre participan cerca de unas 25 personas que le ponen el hombro y el corazón por hacer feliz a estos niños.
E.D: ¿Qué siente cuando ve la sonrisa en un niño?
J.L.C: Una felicidad muy grande, uno nunca se imagina que al ayudar a los demás se sienta tal satisfacción, cuando uno regala sonrisas y da sin esperar nada a cambio la felicidad llega por si sola. En sí, esto lo hago con un solo fin; compartir con los niños y hacer junto con los que me ayudan un espacio de alegría y al mismo tiempo que nosotros seamos felices compartiendo con ellos.
E.D: ¿Cómo es la respuesta de los niños hacia usted?
J.L.C: De total felicidad, cuando llegamos a este lugar, de entrada, ya nos reciben con un abrazo y una sonrisa, ellos saben que van a pasar un momento agradable y sin duda el cariño y amor que sienten hacia nosotros es el mejor regalo que podemos recibir al hacer esta bonita iniciativa.
E.D: Para hacer este tipo de actividades se requiere un gran esfuerzo, donde se gasta tiempo y se invierten recursos, ¿De dónde sale el dinero para financiar esta actividad?
J.L.C: Primero que todo quiero hacer una aclaración, nosotros no pertenecemos a ninguna fundación, lo hacemos como iniciativa propia, solo recibimos aportes de personas naturales que se convocan a través de las redes sociales, quienes donan regalos nuevos o de segunda, otras dan dinero en efectivo, el cual lo utilizamos para comprar el refrigerio. También se hace rifas para generar más dinero y así dar entre 90 y 110 regalos.
E.D: ¿Cada cuánto se realizan estas actividades con los niños?
J.LC: La idea es hacerlo tres veces al año en abril que es el día del niño, en octubre para la fiesta de disfraces y en navidad. La otra semana me reúno con unos amigos para definir lo de diciembre, en esta ocasión tengo pensado hacer algo diferente, pero todavía falta detalles por concretar.