El día 25 de marzo en las horas de la noche, familiares y amigos de la víctima encontraron el cuerpo sin vida del minero, sin embargo, afirman que lo hubieran podido salvar de no ser por la suspensión de labores que emitió la Agencia Nacional Minera (ANM).
El día 10 de marzo, la Agencia decretó que se detendrían las labores por inestabilidad del terreno y peligro inminente para los socorristas. Familiares y amigos presentaron su rechazo ante esta decisión y refutaron que se podía continuar con las labores de rescate.
El indignante caso de Jhon Fuentes, el minero que quedó atrapado en la mina La Victoria en Socotá, retumbo en los corazones de los boyacenses, quienes evidenciaron día a día la lucha constante de la familia para poder tener una respuesta de las autoridades competentes. Se llevaron a cabo marchas en Socotá y hasta en Bogotá para poder tener un respaldo, ayuda y respuesta por parte del Estado. Figuras públicas influyentes de Boyacá realizaron varios llamados de atención e incluso hicieron una petición directa al presidente Iván Duque, pero no se obtuvo pronunciamiento alguno.
Este hecho tan lamentable refleja la realidad de la minería en Boyacá. Por más de 15 días, los familiares insistieron y presionaron a la ANM para obtener una respuesta, al no tenerla, empezaron las labores de rescate sin ningún respaldo estatal y comprobaron que sus razones y argumentos eran válidos al encontrar el cuerpo de Fuentes.
Ahora bien, la preocupación de la comunidad por sus familiares que trabajan en la minería es inminente, al ver que ninguna autoridad se hizo cargo de este lamentable suceso.
