Los campesinos del sector denuncian que los casos de robo de ganado se han incrementado notablemente.
Robos, robos y más robos, eso es lo que denuncian los campesinos habitantes de los municipios del Bajo Ricaurte, quienes aseguran que además de los hurtos, tienen que soportar que quienes cometen el delito, sacrifiquen los animales en el mismo lugar del robo, dejando los desperdicios en el lugar.
Inicialmente llegaron a pensar que se trata de vandalismo o de una especie de venganza, ya que al llegar al lugar donde permanece el ganado, encontraban rastros de sangre y carne.
Por su parte, el Departamento de Policía de Boyacá ha asumido la investigación de los robos, y ha hecho una serie de recomendaciones para acabar con esta situación.
También crearon grupos de Whatsapp para mantener contacto frecuente con los líderes comunales y líderes ciudadanos de la zona rural.
La Alcaldía de Moniquirá, municipio afectado con el incremento de casos de este delito, dispuso de recompensas para motivar las denuncias por parte de la ciudadanía frente a estos casos.
Las autoridades policiales de municipios como Moniquirá, Chitaraque, Togüí y Arcabuco ya han sido alertadas de la situación y por ello incrementarán los controles especiales en expendios de carne, al transporte de la misma y al sacrificio de ganado.
