Para evitar la difusión y avanzar en la erradicación del foco de fiebre aftosa que se presentó en un predio ganadero, ubicado en el municipio de Sogamoso, Boyacá, el ICA realizó el sacrificio sanitario de los 19 animales existentes en la finca, como acción establecida en los protocolos internacionales de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), para el control de la fiebre aftosa, según el informe oficial del Instituto que acaba de ser difundido.
Inicialmente eran 18 animales, pero una vez presentado el foco, hubo un nacimiento de una ternera la cual también tuvo que ser sacrificada, para evitar poner en riesgo la ganadería boyacense.
Las reses sacrificadas fueron enterradas inmediatamente bajo el acompañamiento de Corpoboyacá, cuyos técnicos revisaron que la fosa cumpliera con los requerimientos de protección ambiental en temas relacionados con el tamaño de la fosa, profundidad, amplia distancia con fuentes de agua y reservorios, al igual que la utilización de geomembrana y geotextil, lo que evita la salida de líquidos provenientes de los cadáveres de los animales, lo que garantizan que no haya contaminación del suelo o de las aguas.
Así mismo se iniciaron las labores de limpieza en el predio afectado, que estará un mes en vacío sanitario, es decir sin ingreso de nuevos animales.
Teniendo en cuenta que el propietario del predio cumplió con todos los requisitos establecidos por el ICA, será compensado con el valor de los animales, de acuerdo con lo establecido en la Resolución ICA 12699 de 2017. Ver: http://www.nuevalegislacion.com/files/susc/cdj/conc/r_ica_28934_18.pdf
En el mismo sentido, el ICA tiene activos sus mecanismos de vigilancia sanitaria en todos los departamentos de la zona de contención: Arauca, Boyacá, Cundinamarca, y Casanare, en los que se reforzaron los puestos de control sanitario y desinfección de vehículos.
La fiebre aftosa es una enfermedad de alta difusión vía aerógena, por contacto entre animales enfermos y los objetos inanimados como la ropa de las personas, que están en las fincas, el calzado, el cabello y las herramientas de trabajo, por eso las medidas restrictivas y de bioseguridad que se aplican durante los procedimientos de sacrificio y disposición de los animales.
Vale reiterar que el predio donde han sido sacrificados los animales, ha cumplido con la vacunación contra fiebre aftosa en todos los ciclos establecidos por el ICA. Así mismo, cuenta con la certificación de hato libre de brucelosis y tuberculosis bovina, el certificado en Buenas Prácticas Ganaderas, BPG, y ha movilizado a los animales con las Guías Sanitarias de Movilización Interna correspondientes, lo cual le ha garantizado a su dueño poder recuperar el valor de los animales sacrificados. Así que este ejemplo debe servir a todos los ganaderos para que en próximo ciclo de vacunación por ningún motivo dejen de suministrar sus animales la correspondiente dosis, a la vez que sirva para que los responsables de la campaña de vacunación en realidad hagan la cobertura total de los predios ya que en los últimos ciclos se han denunciados reiterados casos de negligencia de los vacunadores que a pesar de la insistencia de los finqueros han los han dejado sin la vacunación.
