El Hospital está cerca de vivir una dramática crisis debido a la enorme deuda que sostienen las EPS del departamento con el hospital.
Parece una novela de nunca acabar. Pasillos congestionados, servicios de urgencias al borde del colapso, familiares de los pacientes reclamando atención, y el Hospital San Rafael pagando los platos rotos.
La deuda que sostienen las EPS con el Hospital hoy superan los 154 mil millones de pesos, que equivalen al 50% de la totalidad de la cartera vencida de las EPS con la red pública de Boyacá.
Pero a pesar de la evidente crisis, la Superintendencia de Salud ha omitido la problemática y ahora la solución parece más difícil de lograr, más cuando le exigen la prestación a hospitales y clínicas a como dé lugar, así no cuenten con los recursos para ello.
“Necesitamos un apoyo más efectivo de agentes externos ya que la responsabilidad está cayendo sobre las IPS, especialmente en el Hospital San Rafael, que soporta toda la Red de Boyacá. Por eso, si las cosas siguen así, llegará el momento en que se dé el colapso y se empezará a ver la verdadera crisis de la salud en Boyacá”, indicó Lyda Marcela Pérez, gerente del Hospital San Rafael.