Eso dice la ley 2456 de 2025 aprobada en el Congreso de la República por iniciativa del representante Wilmer Castellanos y sancionada por el presidente, Gustavo Petro. Calculan que en el país hay 2.6 millones de personas con algún grado de discapacidad.
En el futuro las personas con discapacidad podrían tener una mejor calidad de vida; y los efectos que esos problemas tienen para su salud, trabajo, educación, socialización y autonomía personal podrían ser mitigados con la ayuda del Estado.
Así lo establece la ley 2456 de 2025, aprobada por el Congreso de la República por iniciativa del representante a la Cámara boyacense Wílmer Castellanos y sancionada esta semana por el presidente de la República, Gustavo Petro Urrego.
Aseguró Castellanos que logros como estos le hacen entender porque valió la pena ser congresista, pues esta ley significará una enorme ayuda para personas que hasta ahora habían sido invisibles para el Estado y para la sociedad.
La Ley aprobada y sancionada crea el Fondo Nacional de Protección y Apoyo para las Personas con Discapacidad y los Cuidadores y, al mismo tiempo, faculta a los concejos y a las asambleas para crear ese tipo de fondos en los municipios y en los departamentos, según dicen Castellanos, con ocho fuentes de financiación, que no especificó.
Se calcula que el Colombia existen más de 2.6 millones de personas con algún grado de discapacidad, pero miles de ellas no tienen posibilidades de ingresos, no tiene quién los cuide, no reciben ninguna ayuda del Estado y, en ocasiones, no tienen ni para satisfacer sus mínimas necesidades.
“La nueva ley apoyará, protegerá y dignificará la vida de las personas con discapacidad y sus cuidadores”, asegura Castellanos y agrega que esa ley se enfoca en garantizar la justicia social en el país.
Estos fondos tendrán ocho fuentes de financiación que les permitirán contar con recursos para avanzar hacia el cumplimiento de los objetivos planteados, que son:
1. Otorgar una transferencia monetaria o subsidio económico para dignificar su vida a trasvés de subsidios económicos para la discapacitados o sus cuidadores.
2. Proveer dispositivos tecnológicos de última generación (prótesis, sillas de ruedas eléctricas, audífonos de última generación, etc) que mejoren la funcionalidad de las personas.
3. Financiar proyectos productivos para generar ingresos que sean autosostenibles.
4. Mejorar las condiciones de habitabilidad y accesibilidad, incluyendo el mobiliario.
5. Implementar programas de formación académica y cualificación para los cuidadores.
“No es una ley cualquiera, enfatiza Castellanos, es una ley que brinda inclusión, equidad y justicia social para Colombia”.
El representante también manifestó que “desde que llegamos al Congreso de la República, teníamos claro nuestro compromiso de trabajar por quienes más lo necesitan, quienes son los más vulnerables, por aquellos que han dedicado su vida al cuidado y dignificar la vida de la población que, a pesar de las barreras, lucha día tras día para salir adelante: las personas con discapacidad”.
Asimismo, el congresista expresó su agradecimiento a sus compañeros por el apoyo a la iniciativa y a su equipo de trabajo, con quienes construyeron y sacaron adelante esta ley de la República. “Si queremos una verdadera Colombia en paz, debemos trabajar en la construcción de leyes y políticas públicas orientadas a garantizar una verdadera justicia social, y esta ley tiene como objetivo alcanzar ese fin”, afirmó el representante Wílmer, autor de esta gran iniciativa.
