Cuando el país comenzaba a vivir los momentos de mayor recogimiento de la Semana Santa, el senador y excandidato presidencial Gustavo Petro, sorprendió con el anunció de su diagnóstico médico, indicando la presencia de un cáncer en su cuerpo.
Lo hizo en tono pausado, explicando que éste diagnóstico es el resultado de varios exámenes practicados en Cuba y Colombia, que darían cuenta de la aparición del cáncer en la región del esófago.
El dirigente de la “Colombia Humana”, dejó claro que se someterá a una operación inmediata, programada para este lunes 13 de abril en Cuba. Y, posteriormente, comenzaría procedimientos de radioterapia y quimioterapia, si así se determina a partir de esta intervención.
El anunció sorprendió al “país político”, ya que los debates en los últimos días, se habían centrado en la manera de asumir este fenómeno de la pandemia, los contratos que comenzaron a aparecer con extraños costos en los alimentos para afrontar esta crisis y el desafío que tiene el Congreso de la República para comenzar a operar y debatir en medio de esta cuarentena.
La primera dirigente boyacense en reaccionar al anuncio de Gustavo Petro, fue la senadora de la UP, Aida Avella. Lo hizo, a través de su cuenta oficial, con un video, expresando mensajes de solidaridad. Posteriormente se manifestó el congresista Wilmer Leal, el exgobernador Carlos Amaya, el senador Ciro Ramírez y el Representante Rodrigo Rojas.
Aunque la campaña por la presidencia aun no da sus primeras puntadas, el tratamiento médico que le practicarán a Gustavo Petro podría ser aprovechado por varios sectores políticos para ganar terreno, en el escenario de la construcción de una alternativa desde las fuerzas democráticas y de oposición. Sin embargo, la mayoría de sus seguidores se mantienen confiados, porque saben que este dirigente ha librado batallas similares, en el plano de lo médico, lo jurídico y lo político, de las cuales ha resultado potenciado.