Por| Jacinto Pineda, Coordinador Académico territorial ESAP Boyacá Casanare
El 25 de noviembre 1.958 se creó la ESAP bajo el reto de la modernización del Estado. No hemos sido inferiores al desafío, sin embargo, hay trecho que recorrer para consolidar un Estado cercano a los ciudadanos, transparente y eficiente. De igual manera se cumplen 30 años de presencia de la ESAP en Boyacá y Casanare.
Eran tiempos de esperanza, como los que siempre hemos vivido; los afanes de la época tras la dictadura militar de Rojas Pinilla giraban alrededor de la implementación del frente nacional, acuerdo a través del cual los partidos políticos, Liberal y Conservador, se turnaban en la presidencia, con el fin de civilizar las disputas bipartidistas. Los objetivos del mismo pueden resumirse en: consolidar un pacto de paz, la búsqueda de transformaciones sociales, económicas y políticas, y la modernización del Estado. Fruto de ese afán nace la Ley 19 de 1958 que crea la Escuela Superior de Administración Pública(ESAP), el Departamento Nacional de Planeación (DNP) y el Departamento Administrativo del Servicio Civil (hoy Función Pública).
Una administración pública atrapada en la violencia bipartidista y convertida en botín de guerra, solo expresaba los odios y revanchas territorializados en el país. Ante la realidad era imperante la implementación de un sistema técnico dentro de la administración pública que la alejara de los avatares políticos, condición sine qua non para modernizar el Estado. La Institución es creada, similar a su par francesa la ENA, como un centro de estudios y creación de pensamiento donde se formaran los administradores públicos que cumplieran la función modernizadora.
Los inicios de la ESAP están marcados por las rápidas trasformaciones de la sociedad colombiana en la década de los sesenta, siglo XX, fundamentalmente por la acelerada urbanización que imponía nuevos desafíos a la administración pública para ofrecer servicios a la creciente población. Bajo este contexto el presidente Alberto Lleras Camargo, en 1.962, pone en marcha la Escuela, con la facultad de ciencias políticas y administrativas, además del área de capacitación. En la década de los setenta la ESAP impulsará los programas de capacitación en las regiones y fortalecerá la formación pregradual; pero, será la década del ochenta, con los aires de la descentralización la que llevará a la ESAP al plano regional y local. Es así como en 1.988 la ESAP nace en Boyacá, en la ciudad de Sogamoso, con presencia además en Casanare. La Constitución de 1991 y los cambios institucionales profundizaron la descentralización en la cual la ESAP ocupará un primer plano como institución que ha posibilitado fortalecer la capacidad de los entes territoriales para asumir el reto de un país centralizado a uno descentralizado.
Es indudable que en este camino hacia la modernización del Estado la ESAP ha cumplido un papel relevante. Los esfuerzos por generar capacidad institucional desde el plano local y regional para asimilar e incorporar los cambios normativos e institucionales, sin lugar a dudas, han contribuido a mejorar las condiciones de miles de colombianos. Es cierto que la persistencia de fenómenos como la corrupción y la desidia son obstáculos para desatar desarrollo; sin embargo, los logros obtenidos nos permiten afirmar con certeza que esta Colombia en sesenta años ha dignificado la situación de sus habitantes a partir de administraciones públicas más eficientes.
Hoy la ESAP, es una institución que brinda educación a través de programas acreditados de alta calidad como, Administración Pública presencial en Bogotá, y Administración Pública territorial en 134 municipios de Colombia, muchos de ellos aislados y con rezago en su desarrollo. Cuenta con 13.413 estudiantes en pregrado y 1.776 en programas posgraduales. La ESAP en Boyacá y Casanare hoy despliega sus funciones desde nueve municipios, con 1.088 estudiantes de administración pública, especializaciones y maestría. A través de capacitación se fortalecen servidores públicos y organizaciones sociales y comunitarias, en una tarea que llega a los 142 municipios bajo su jurisdicción.
Baja capacidad institucional de los municipios es pobreza para sus habitantes, por ello, la tarea de la ESAP a partir de fortalecer la administración pública local, regional y nacional debe ser valorada por la sociedad y el Estado. La ESAP tiene como reto ser timonel en las transformaciones de las entidades públicas y ser el órgano consultor del Estado en el saber administrativo público. La ESAP es, y deberá seguir siendo, una institución universitaria fundamental para la Colombia que soñamos.