Luego de los resultados en estas elecciones presidenciales, está claro que la “Ciudad del Sol y del Acero” expresa un grito de renovación y cambio en sus liderazgos políticos. En primera vuelta los votos del profesos Fajardo y los de Gustavo Petro son absoluta mayoría y en la segunda el importante número de los votos de Petro así lo manifiestan.
En primer lugar, la ciudadanía está a la expectativa del papel que cumpla el representante a la Cámara, Wilmer Leal, quien con 4.900 votos en Sogamoso y su pública amistad con Carlos Amaya, tiene una función importante en el corto plazo, en la etapa final de gobierno departamental y los resultados que puedan generar para la ciudad.
Se espera coherencia en las decisiones de respaldos respecto a los avales en las próximas elecciones locales en donde hay un grupo de militantes de siempre, que dentro de las toldas verde han hecho un buen trabajo y están a la espera de una oportunidad para asumir candidaturas, puesto que con los resultados obtenidos son presa fácil de tentación por parte de políticos tradicionales que hoy les deben ofrecer el oro y el moro por su respaldo para figuras desgastadas y ya derrotadas en la ciudad.
En otro escenario figura el profesor de hacienda pública de la UPTC, Alejandro Gutiérrez, quien ya se plantea asumir el reto de liderar un proceso político que recoja el inconformismo y una nueva expresión ciudadana en Sogamoso, puesto que luego de su paso por el gobierno de Carlos Amaya se fue a unos escenarios de carácter nacional en la Región Central. Sus 11 mil votos y un segundo lugar en las elecciones anteriores para alcaldía, lo ponen la altura de este momento político.
Gutiérrez desde sus redes sociales, ha venido impulsando un proyecto con más de 50 investigadores comunitarios que ha llamado “Visión Sogamoso”, analizando las principales problemáticas de la ciudad y posibles soluciones. Desde este espacio, es casi seguro que vuelva a la arena política puesto que sus resultados le confieren tal responsabilidad.
En ese orden de ideas, estas dos figuras, se convierten en protagonistas en el panorama electoral de una ciudad que en tiempos pasados era conocida por su liderazgo, su industria y su fundamental relación con los llanos orientales.