Al cumplirse un mes del fallecimiento de nuestro amado padre, Pedro Esaú Mendieta Palacios, Director del Periódico EL DIARIO, hoy recordamos, como todos los días, sus enseñanzas, su saludo sin falta al iniciar la mañana, su hermosa sonrisa, su carisma y energía para emprender las labores diarias, y sobre todo, el gran amor que nos transmitía con su trato respetuoso y su permanente compañía en todos los momentos, fueran buenos o malos, ahí estaba ese ser maravilloso, siendo nuestro amigo y guía, el parcero incondicional, el padre sin igual.
La alegría y actitud positiva ante la vida eran su sello personal, esa marca que nos dejó huella en el corazón, a su familia y amigos, a todas las personas que en el camino de la vida compartieron de alguna manera u otra con él. Nuestro padre cosechó amor en esta tierra y tuvo la dicha de sentirlo hasta el último momento de su existencia. Un hombre que, a pesar de sus defectos, como todo ser humano, siempre tuvo el propósito de hacer lo que tuviera a su alcance por el bienestar de los demás, de pensar en comunidad, de defender el territorio, una de sus principales motivaciones, que lo llevaron a amar su profesión de comunicador y cuyo fruto más querido fue el desarrollo del proyecto del Periódico EL DIARIO. Fue una labor de la cual nuestro padre estuvo muy orgulloso, realizándola con toda la entereza y persistencia, porque el camino no fue fácil. Pero la satisfacción de mantener su sueño vivo, siempre valió la pena para él. Y ese es su gran legado, el ejemplo que con esfuerzo, constancia, amor por lo que se hace y alegría ante la vida, todo es posible.
Por eso hoy sentimos que él está más vivo que nunca, que su sonrisa y sus valiosas enseñanzas nos acompañarán por siempre, a todos los que tuvimos la fortuna de conocerlo, de compartir espacios con él, una charla amena, un café en la Plaza de Bolívar de Tunja, en el Pasaje Vargas que fue su oficina por mucho tiempo, donde compartió sus conocimientos, experiencias, opiniones y buen humor, con el amigo, con el conocido, con el detractor de sus ideas, en fin, con toda la gente, que como él expresaba, eran una “berraquera”.
Finalmente, agradecemos todas las manifestaciones de aprecio y de cariño que recibimos hacia nuestro amado padre, en el momento de su partida por parte de los lectores y seguidores del Periódico EL DIARIO, sus buenos amigos, familiares y de las diferentes instituciones que exaltaron su labor social, como la Gobernación de Boyacá, la Alcaldía de Tunja, la Cámara de Comercio de Tunja, la Asamblea de Boyacá, el Concejo Municipal de Tunja, Fenalco Boyacá, Fundación Milpa, Sinaltracomfa, Corporación Boyacense de Periodistas, UPTC y la Cámara de Representantes. Mil gracias a todos.