Denuncian a través de Veeduría ciudadana que en Floresta, habría sido vacunada Rubiela Verdugo, esposa de Ángel Pedraza, exfuncionario del Centro de Salud del municipio. Mientras, una auxiliar y una Dra. que harían parte de la primera línea contra la COVID-19, no han sido vacunadas.
Según los denunciantes, Verdugo «fue inoculada, sin ningún motivo razonable y comprobando que fue utilizada una de las vacunas que llegaron al municipio de Floresta, que era para personal médico y atención primera línea y para adultos mayores de 80 años».
Añaden que Rubiela Verdugo «en este momento tiene un contrato de Prestación de servicios profesionales para la asesoría administrativa en los procesos de contratación, reportes gerenciales y seguimiento a indicadores de gestión, por un valor de de $13,200,000 […] si ella es de profesión abogada ¿es de primera línea de atención al Covid-19?, o, por el contrario, hace parte de los adultos mayores (mayor 80 AÑOS)?».
Agregan en la denuncia que «Si la gerente del centro de salud de Floresta que también fue vacuna hace parte de la primera línea de atención, en cambio la auxiliar de vacunación Vilma Cely y la Dra. profesional Carmen Cusba, siendo profesionales de primera línea contra el Covid-19, no fueron vacunadas».
Ante esto, desde la veeduría exigen el debido pronunciamiento por parte de las autoridades competentes «Realizo un llamado a la primera autoridad del municipio Dr. JULIAN RINCON ALCALDE. y a la personería, para que se pronuncien respecto al tema, ya que la gerente del centro de salud no ha presentado una explicación de acuerdo a la supuesta irregularidad que se denuncia, también recordarle a las autoridades competentes que todos los culpables deben renunciar a su cargo por la responsabilidad que tengan respecto al caso».