Las fuentes hídricas del país correrían serio peligro si se utilizara esta práctica de extracción de petróleo no convencional.
El Temor y la zozobra reinan tanto en el país como en el departamento ante los anuncios de posible ‘fracking’. Y es que, esta práctica de extracción de petróleo no convencional, ha sido prohibida en varios países del mundo por las catastróficas consecuencias que produce.
Uno de los recursos que resulta más afectado por el ‘fracking’ es el agua, ya que la perforación del suelo contamina los acuíferos. Esto sería perjudicial para el territorio colombiano, ya que hay más de 5.800 kilómetros cúbicos de agua subterránea, distribuidos en 75% del país.
Según Edwin Castaño, presidente de la Unión Sindical Obrera de la Industria del Petróleo, este método de extracción de hidrocarburos, también afectaría a las fuentes de agua superficiales.
“Lo que se hace es utilizar grandes volúmenes de agua provenientes de ríos y quebradas, sumado a arenas y químicos, inyectándolos hasta el fondo de la roca, y luego esa agua la utilizan para desplazar el crudo hacia la superficie”, indicó Castaño.
Se estima que para extraer un solo barril de petróleo se necesitarían 10 millones de pies cúbicos de agua, la cual es utilizada para el sector agropecuario o consumo humano.
Conozca más del ‘fracking’
Esta técnica parte de la perforación de un pozo vertical hasta alcanzar la formación que contiene gas o petróleo. Seguidamente, se realizan una serie de perforaciones horizontales en la lutita, que pueden extenderse por varios kilómetros en diversas direcciones. A través de estos pozos horizontales se fractura la roca con la inyección de una mezcla de agua, arena y sustancias químicas a elevada presión que fuerza el flujo y salida de los hidrocarburos de los poros.
El Fracking puede traer la disminución de la disponibilidad del agua, contaminación de las fuentes hídricas, emisión de gases causantes del calentamiento global e impactos en la salud.