El nuevo alcalde de Duitama se posesiona ante la Notaria Segunda del Circuito. El primer escollo que encontrará Ortega es que la exalcaldesa Constanza Ramírez y la saliente mandataria Diana Patricia Monsalve dejaron casi todo contratado, hasta diciembre.
La que comienza hoy es casi que una contrareloj para Hernel David Ortega en su objetivo –como él lo anunció en campaña- de cambiar la historia de Duitama. Para alcanzar esa meta apenas tendrá un poco más de dos años y tres meses; en total, 835 días, lo que parece muy poco tiempo en medio de tantas limitaciones y dificultades.
Sin embargo, en la campaña, cuando se le preguntó si no era muy poco el tiempo y si no sería mejor que esperara y se lanzara para buscar una alcaldía de cuatro años, Ortega respondió que en 26 meses es posible comenzar la transformación de la ciudad.
De manera que el candidato y desde hoy Alcalde aceptó un reto que resulta desafiante
De manera que el candidato y desde hoy Alcalde aceptó un reto que resulta desafiante. La ciudad tiene un presupuesto anual un poco superior a los 170.000 millones de pesos, de los cuales un buen porcentaje se dedica a gastos de funcionamiento y servicio de la deuda y los recursos para inversión, como sucede en casi todos los municipios y ciudades de Colombia, no son suficientes para cubrir las enormes demandas en educación, cultura, desarrollo rural, ambiente, inclusión social…
Después de que Duitama fuera considerada como uno de los mayores ejes industriales del departamento, en la última década se ha producido un rezago, que tiene repercusiones sobre la generación de empleo. La mayoría de sus empresas tienen dificultades en materia de competitividad y parece que no hubiera pertinencia educativa con las realidades y necesidades del mercado laboral.
Desde la administración municipal se podrían facilitar condiciones para el resurgimiento del sector industrial y de subsectores como la metalurgia y la metalmecánica, sin olvidar sectores como el de autopartes o el de la transformación de recursos naturales. No hay que olvidar que la ciudad tiene una de las pocas ciudadelas industriales que funcionan como tal en Boyacá, que reúne empresas de diversa naturaleza en aspectos como construcción, ensamble de carrocerías para el transporte de pasajeros y de carga, industrias de procesamiento de vidrio, de procesamiento de lácteos y una planta de sacrificio de aves de corral, entre otras.
La ciudad necesita también ponerse al día en el tema de su ordenamiento territorial, con perspectivas a mediano y largo plazo; definir unas estrategias en el contexto socioecononómico, orientar la inversión pública y definir proyectos integrales en torno al modelo económico y social en armonía con el medio ambiente y el patrimonio cultural, determinar las políticas públicas y establecer el uso de suelos de acuerdo a la vocación que se determine para su territorio.
En plena campaña, Ortega planteó el compromiso de que habrá una relación distinta entre el Gobierno local, los usuarios y las empresas de servicios públicos, casi todas ellas –con excepción del agua- en poder de privados.
Dijo Ortega que hay que replantear esa relación, que le exigirá cuentas a las empresas y que espera que esa situación tenga efectos en el mejoramiento de la calidad del servicio y en las tarifas, lo cual resulta complicado porque hay unos contratos firmados por administraciones anteriores.
Dijo, por ejemplo, que no entiende como la empresa de aseo dispone de los residuos sólidos en Tunja, cuando ese transporte cuesta más, cuando podría hacerlo en Sogamoso.
Así mismo se refirió a la participación que el municipio debería tener en las utilidades de Urbaser –que es como se llama la empresa de aseo, que podría traducirse en tarifas más bajas para los usuarios.
El proceso de privatizaciones en Duitama comenzó en 1997 y desde entonces se han entregado servicios como el alumbrado público, el aseo, el centro agroalimentario y el terminal de carga.
Empoduitama es la empresa de obras sanitarias, encargada de la prestación del servicio de agua, pero se ha convertido –como lo han denunciado muchos- en fortín político y en caja menor de la administración. Una de las tareas que tendrá Ortega es demostrar que la empresa es viable, que lo público se puede administrar con eficiencia y que incluso puede ser rentable socialmente.
Otro problema con el que tendrá que lidiar el Alcalde que se posesione hoy es el de la carrera 42, que es el paso por el sector urbano de la doble calzada, lo que ha significado alto índice de accidentalidad y problemas de movilidad.
La clase política y dirigente de Boyacá no ha logrado la atención del Gobierno nacional para que se construya una variante que permita sacar el tráfico pesado del casco urbano, al igual que viene sucediendo con Paipa, a pesar de que las variantes de ambas ciudades estaban contempladas desde el comienzo como parte del megaproyecto vial.
Otro asunto del que tendrá que ocuparse Ortega es el de la actualización del Plan de Ordenamiento Territorial, lo que no se ha hecho desde hace más de 16 años.
Para actualizar ese POT, Ortega dice que contratará una firma consultora que aproveche las capacidades de los profesionales duitamenses, que son quienes conocen su territorio.
Lo que Ortega prometió
En entrevista para el periódico EL DIARIO David Ortega reconoció que la ciudad está viviendo su peor momento, lo peor crisis social de su historia.
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Por esa razón aseguró que está dispuesto a poner al servicio su experiencia y su conocimiento para cambiar esa dinámica.
Entre otras cosas, dijo que en estos dos años y tres meses construirá mil soluciones de vivienda para familias que lo necesiten.
Faltando pocos días para las elecciones aseguró Ortega que tuvo la oportunidad de conversar con la Ministra de Cultura para trabajar en tres importantes frentes para la ciudad: el Teatro Bicentenario, la remodelación del Molino Tundama y la construcción de una biblioteca municipal.
Aseguró que también habló con otros ministerios, que conversó con congresistas y que hizo varias gestiones que le permitirán conseguir recursos y proyectos para Duitama.
Dijo que mantiene una buena relación con el gobernador de Boyacá, Ramiro Barragán
También dijo que mantiene una buena relación con el gobernador de Boyacá, Ramiro Barragán, y recordó que su partido, el Liberal, estuvo unido con el Verde para lograr la Gobernación.
Según Ortega, en los dos próximos años Duitama debe recuperar su lugar en el contexto nacional y convertirse en una ciudad de oportunidades, de desarrollo y que genere calidad de vida para sus habitantes.
Dijo que desde la administración combatirá el delito y el crimen que hoy afectan a los ciudadanos y que para eso es necesario recomponer la relación entre autoridades y comunidad. También será necesario utilizar las herramientas tecnológicas para desarticular las estructuras delictivas.
Según Ortega, uno de los grandes problemas para los jóvenes es que no tienen oportunidades y por eso otorgará 500 becas para estudiar en la universidad pues, según dijo, de cada 100 egresados de educación media apenas 10 ingresan a la universidad.
Otras de sus promesas es que recuperará la malla vial y, en el tema ambiental, revisará lo que ocurre en Tocogua, tomará medidas para proteger los ecosistemas de páramo y apoyará los acueductos veredales.
Al periódico EL DIARIO, Ortega le dijo que construirá la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales para garantizarles calidad del líquido a los campesinos río abajo.
“Duitama debe ser destino turístico, productivo y cultural”, indicó. Su propuesta es que la ciudad tenga eventos culturales y deportivos durante todo el año.
En fin, son muchas tareas, pero Ortega es joven y muy dinámico. Por esa razón también fue que les ganó la elección a sus rivales de la campaña política. “No he desperdiciado ni un día en mi vida”, dijo durante una entrevista previa a elecciones.
Finalmente, Ortega aseguró que en un futuro quiere ser congresista y tal vez hasta Presidente de la República, por esa razón enfatiza que no defraudará y que espera que en un futuro los ciudadanos duitamenses estén agradecidos con lo que él hizo por la ciudad.
