Durante el diálogo organizado por la Unidad de Investigación y Acusación de la JEP (Jurisdicción Especial para la Paz), 25 víctimas del departamento, expresaron y reiteraron su llamado a que se abra el caso de violencia sexual.
Las personas que denunciaron sus casos ante la JEP pertenecen a Tunja, Sogamoso, Moniquirá, Aquitania, Miraflores, Guateque, Garagoa, el Cocuy, Duitama, Cubará, Cómbita, Chiquinquirá y Berbeo.
Las víctimas dijeron que para ellas es muy importante que se reconozca que este departamento ha sido azotado por la violencia, que además es receptor de víctimas de diferentes delitos de otras regiones de Colombia y no es un lugar tranquilo, sin conflicto, como la mayoría cree. Además, víctimas de violencia sexual enfatizaron en la importancia que se abra el caso de este delito en la Jurisdicción.
“Boyacá es considerado un ‘remanso de paz’ y se cree que aquí no sucedió el conflicto, hoy les quiero recordar que si hubo conflicto y que además es un departamento receptor de personas que sufrieron toda clase de violencias” fueron las palabras de Maribel Hernández, víctima del conflicto armado quien, también, propuso organizar reuniones con los representantes de las víctimas de delitos como desaparición forzada, desplazamiento, secuestro y violencia sexual, para de esta forma, “ayudar a la población de cada municipio y dar a conocer el ejercicio que hace la JEP”.
En el mismo diálogo convocado por la Unidad de Investigación y Acusación, víctimas de violencia sexual enfatizaron en la importancia de que se abra el caso de este delito en la JEP, porque según ellas, “no fue un delito transversal, sino que fue directo y en este departamento hay más de 400 víctimas que lo sufrimos”, afirmó Sandra Guerrero.
