Aparte de lo exótico que parece, y con el folclorismo con que la generalidad toma el tema, me atrevo a pensar que nos estamos hundiendo en la decadencia de nuestra condición de lugareños con jerarquía histórica.
¿Qué nos pasa? donde está esa tradición de Capital Histórica, de cuna de prohombres, de próceres y sabios mártires, de Capital de la Provincias Unidas de la Nueva Granada, de ser epicentro de todas las epopeyas libertadoras de esta parte de América. Tunja Ciudad Heroica y Taller de la Libertad, la nombró un día el Libertador Simón Bolívar, cuna también de presidentes de Colombia, de magistrados de altas cortes, en fin.
¿Será que esta noble tierra se cansó de parir hombres o mujeres de la talla de nuestros antepasados?
¿Será que el efectismo de los espejitos con que los españoles confundieron a nuestros aborígenes muiscas, retornó a nuestros territorios?
O…Será que repetimos las estrategias, en la historia de otras latitudes, cuando el adversario construyó el colosal caballo de Troya, como ofrenda, pero que luego en una noche plácida y tranquila, ¿nos tomaron por sorpresa para imponernos un extraño gobernante?
Hay tantos interrogantes en este momento de nuestras vidas, que me estimulan a cavilar y expresar el disgusto, primero por lo que nos ocurre, y luego intentar encontrar el Santo Grial de la verdad absoluta. Me confieso alejado de la dinámica de la política, pero como humanista, debo también aclarar que esta reflexión esta deslindada de lo personal, ya que ni conozco al personaje elegido, como creo, le ocurre a la inmensa mayoría de los tunjanos y de quienes habitan esta hermosa ciudad, que se hizo visible el día de las elecciones, que por los comentarios se supo que era profesor de la UPTC, que no tenía televisor en su cuarto de alquiler y que tenía un modesto cacharrito, para desplazarse, luego ultima mente se le vio montando un animoso corcel, en el que mostraba su generoso abdomen y su gracias esteparia.
Hoy en su posesión en la plaza de Bolívar de Tunja, la multitud convocada tendrá la oportunidad de ver a su nuevo alcalde, a quien le deseamos sepa mantener el equilibrio, cuando en es este dramático cambio de vida, el poder, en todas sus expresiones, le empiece a enviar mensajes, tan extraños, como su propia humanidad.
Hoy Tunja como en días anteriores tendrá las mejores portadas de los medios, todos querrán tomarse la “selfi”, con el ahora, Alcalde Ruso”, y será un día más en la historia de esta Tunja Heroica y Patriotica.
Yo me recogeré en mi trinchera filosófica… y como buen patriota, esperaré a que el tiempo y los hechos, que son razones, nos muestren el escenario de esta transición a lo desconocido, que puede ser mejor, de lo conocido, hasta ahora.