El trabajo de descontaminación permitió la recuperación de 71 hectáreas de espejo de agua.
En el marco del Tercer Encuentro por la Protección de las Lagunas de Fúquene y Tota, se dieron a conocer cada una de las acciones que vienen realizando corporaciones autónomas regionales, comunidades, asociaciones ambientales y gobiernos departamentales para la recuperación de estos cuerpos de agua.
El encuentro, realizado en el Hotel El Refugio, ubicado en el puerto de Guatancuy, en Fúquene, Cundinamarca, contó con la presencia del director de Corpoboyacá, Herman Amaya, y el gobernador de Boyacá, Ramiro Barragán, quien se mostró entusiasta por el trabajo realizado en la Laguna de Fúquene, y proyectando acciones similares para el Lago de Tota.
Es que no ha sido un trabajo menor, pues a lo largo de 2020 la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) realizó la remoción de más de un millón de metros cúbicos de sedimentos, lo que equivale a la recuperación de 71 hectáreas de espejo de agua.
«Le apostamos no solo a la recuperación de este cuerpo lagunar, sino que buscamos una recuperación integral de toda el área protegida delimitada en el sector de la cuenca alta del río Suárez con el fin de tener un ecosistema apto para que la fauna y la flora puedan interconectarse a través de corredores ecológicos”, señaló Luis Fernando Sanabria, director de la CAR:
Para llevar a cabo esta labor la CAR necesitó de 76 máquinas entre retroexcavadoras anfibias, retroexcavadoras orugas, barcazas de transporte de material, volquetas y bulldozer.
Igualmente se necesitó de la instalación de seis plataformas acuáticas en puntos estratégicos de la laguna, con las cuales se monitoreó permanentemente la calidad del agua, del aire y del suelo.