Derby caliente en la fría Tunja y victoria para Patriotas

El sol se hizo presente gran parte de lo que fue el mejor partido del año en Tunja. Patriotas y Chicó protagonizaron un derby lleno de emociones. Ambos equipos pudieron abrir el marcador en la primera etapa, pero los palos y la buena actuación de los porteros no permitieron la llegada del grito sagrado. En el arranque de la segunda mitad el sol desapareció y con este parecía desdibujarse el partido, que entraba en la zona del juego fuerte y los conatos de gresca. Pero de repente un cabezazo de Darwin Carrero rompió el cero, y a partir de allí vino una seguidilla de goles en menos de diez minutos. Al final Patriotas supo ponerse en ventaja nuevamente, aguantar cuando fue arrinconado, y luego ampliar la ventaja para así quedarse con el último derby del año.

Patriotas y Boyacá Chicó midieron fuerzas en el marco de la primera fecha de la Liguilla Betplay 2020. El juego disputado en el estadio La Independencia terminó con marcador de 3-1 en favor de Patriotas.

Pasaron nada más 30 segundos cuando un error en salida del equipo ‘ajedrezado’ le permitió crear la primera oportunidad a los dirigidos por Abel Segovia, Misael Martínez robó la esférica pero en un rápido achique el golero Pablo Mina evitó la caída de su arco y se convirtió en el héroe de la cancha en el amanecer del partido.

Cristian Barrios a los 8 tuvo una nueva chance. Pablo Mina se la jugó una vez más en el achique, cerrándole el ángulo a Barrios y ocasionando un tiro de esquina en una jugada que parecía iba a terminar en gol.

Nelino Tapia hizo revolcar por primera vez en el juego al guardamenta Carlos Mosquera sobre los 12 minutos con un potente remate de media distancia que no encontró dirección de arco.

Sobre los 30 minutos Óscar Vanegas tuvo una oportunidad inmejorable tras un centro que ni Pablo Mina ni los defensores ‘ajedrezados’ supieron controlar. Para infortunio de Vanegas la pelota terminó estrellándose contra uno de los postes.

Boyacá Chicó pudo abrir el marcador a los 37 minutos tras un grosero error del portero Mosquera, claro que el guardameta se recompuso, atajó el disparo de Edinson Palomini, y en el rebote Jacobo Pimentel terminó rematando contra el horizontal.

En el inicio del complemento la opción  más clara la tuvo Patriotas, fue en apenas cinco minutos con un cobro de tiro libre de Jhon Fredy Miranda que salió rechazado rebeldemente por el larguero.

Sobre los 13 minutos del complemento una entrada mal intencionada de Jhon González sobre Daniel Mantilla fue mediocremente castigada por el juez central con una tarjeta amarilla. Eso desató una gresca entre ‘lanceros’ y ‘ajedrezados’, que al final pasó desapercibida por el referí pues ningún hombre terminó expulsado a pesar de la lluvia de puñetazos.

Tres minutos más tarde Darwin Carrero abrió el marcador con un remate de cabeza que no le dio oportunidad alguna al golero Mina.

Frank Lozano iba a conseguir la igualdad tres minutos después tras una pelota que fue doblemente cabeceada en el área de Patriotas, que desubicó al guardameta Mosquera y que le facilitó las cosas a Lozano a la hora de definir.

Pero la alegría le duró poco a los dirigidos por Bélmer Aguilar. Pues de nuevo un cobro de tiro de esquina le permitió ganar en el juego aéreo al equipo ‘lancero’, esta vez el que ganó por arriba fue Óscar Vanegas.

Con la desventaja en el marcador y el reloj corriendo en contra, Boyacá Chicó tomó la iniciativa, pero Patriotas supo replegarse y le hizo difícil patear al arco defendido por Mosquera.

Al final el juez central, Never Manjarrés, recordó que había llevado cartulinas rojas, y tras un nuevo tumulto decidió expulsar al director técnico debutante, el español Abel Segovia, mientras que en el ‘ajedrezado’ el expulsado iba a ser Camilo Pérez.

Claro que las expulsiones no mermaron la agresividad y el juego fuerte que caracterizo a este derby. De hecho, los minutos finales estuvieron marcados por las continuas agresiones y las entradas desleales.

En el tiempo de adición, una incursión en área ajena por parte de Daniel Mantilla derivó en una pena máxima mal sancionada, pues Mantilla no fue agredida. De todas formas Vanegas iba a intercambiar el cobro por un gol para liquidar el pleito.